He estado hoy podando unos olivos y el cielo daba auténtico ardor de estomago.
Aunque, por aquí llevan fumigando a destajo, desde el viernes por la mañana.
Sea la hora que sea, levantas la vista y hay un avión dejando una bonita emergencia climática; todo el puñetero día.
Hijos de la grandísimo fruta.