Si el anuncio se efectúa como se está aventurando, supone un paso gigantesco en dirección al abismo. La desesperación de las elites que controlan el gobierno de los Estados Unidos parece que se desborda, quemando la tierra bajo sus pies. Un ataque militar a Siria y el cierre de los canales diplomáticos con Rusia supone de facto la guerra con Rusia y muy probablemente Irán y China, o lo que es lo mismo, la tercera guerra mundial. Quiero pensar que son sólo palabras y que tenemos que ver hechos, pero la dialéctica a la que asistimos, a mí, al menos, me resulta desconocida y muy amenazante.
Estados Unidos se ha caracterizado a lo largo de su historia reciente por ser un país agresor e imperialista. No dispone de ningún tipo de mandato de ONU ni sigue ninguna resolución de la misma, agrede e invade territorio de un país soberano sin ningún derecho que lo sustente y amenaza la propia supervivencia humana si se dispone a atacar Siria. Que Dios nos pille confesados.
Como no puedo dar crédito a lo que leo, sigo esperando que todo esto sea simplemente una amenaza vacía, un ladrido impotente, una estupidez o una mala interpretación periodística. Ojalá sea así.
Un saludo.