¿Quien fundó la iglesia católica apostólica y romana?

Quien fue?

  • Jesús de Nazaret a través de Pedro (Versión católica)

    Votos: 49 35,3%
  • Pablo de Tarso (Versión atea-agnóstica)

    Votos: 31 22,3%
  • Constantino I (Versión evangélica)

    Votos: 36 25,9%
  • Obra de satanás (Versión de los TDJ)

    Votos: 23 16,5%

  • Total de votantes
    139
¿Quien fundó la iglesia católica apostólica y romana?
Una cosa es quien fundo el cristianismo y otra muy diferente quien fundo la ICAR
Una cosa es una doctrina y otra la institución que la administra
En todo caso, la ICAR no ´pudo ser fundada por Pedro, Pablo o Clemente. La ICAR es un desprendimiento del tronco original constantinopolitano ya bien entrada la Alta Edad Media, cuando el papa Zacarias se echo a los brazos de los francos.
 
Ni siquiera logro atisbar tu "refutación". ¿Qué quieres decir con esa cita?

En el año 96 Clemente I ERA el Obispo de Roma (que no Papa todavía; el asunto de los "Papas" no se había definido de ese modo hasta varios siglos después). Con ciertas dudas en las fechas, lo cierto es que la Iglesia dar por fecha de su mandato el período 88-97. Otros lo sitúan entre el 92 y el 102.

El problema es que según tú:



Y resulta que Pedro, de haber estado en Roma (cosa de la que no hay documentación ni antecedentes estrictos e indiscutidos) lo habría hecho en el corto período del 67-68. Ni de lejos pudo levantarse de la tumba para investirlo Obispo en el 88 o en el 92 (según la fecha que tomemos para su cargo).

La (muy posterior) historiografía de la Iglesia (Catalogus Liberianus es del año 354), sin mucho sustento para los Obispos previos al año 235 (a partir del cual hay registros más certeros) nos hablan de:

Pedro y Pablo (68-69)
Lino (67-76)
Anacleto o Cleto (76-88)

Y, finalmente:

Clemente I (88-97)

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De todos modos -y gracias o por culpa de las Kairostiadas- estamos en un diálogo de besugos porque lo concreto es que no se puede separar el nacimiento de la Iglesia Católica de una génesis compleja y de múltiples pasos (inspirados por el Espíritu Santo PESE a la limitación de los hombres) y que empieza sin duda con Cristo y su mensaje de salvación, continúa en la obra de los Apóstoles -dentro del judaísmo-, pero adquiere una personalidad propia y diferenciada de éstos gracias a Pablo de Tarso (inspirado de modo directo) y el Concilio de Jerusalém (circa año 50), el desarrollo teológico y doctrinal de los primeros "padres" de la Iglesia (varios entre el S I al IV) y se consolida en una estructura jerárquica y reglamentada en la época de Constantino (Concilio de Nicea y demás).

Este proceso es extraordinario, dotado de una energía divina y sobrenatural abundante (piensen el camino recorrido desde la humilde prédica de Jesús en adelante) y permite -con todos los errores humanos que quieran achacarle- llevar la Palabra de Cristo y el Plan de Salvación de Dios a TODO EL MUNDO en los años siguientes.

Que haya o no una "historia oficial" que tenga algunos flecos es algo absolutamente irrelevante e insignificante al lado de lo que significa tener al alcance de la mano un Plan de Salvación claro, brillante, extraordinario y Divino.

El único besugo es usted que desconoce que hay más obispos a parte del Romano.

Ya sabia que en su ceguera y cabezonería sería incapaz de entender la Carta a los Corintios, que le sigue refutando su perorata historicista decimonónica paternalista.

Léase bien la Biblia y quizás lo vea, que le refuta absolutamente.

A ver caballero Eugenio María Giuseppe Giovanni Pacelli fue investido Obispo auxiliar de Sardes mediante el rito de ordenación episcopal, cuando murió Benedicto XV, Eugenio Pacelli fue elegido Obispo de Roma, es decir Papa.

A San Clemente San Pedro le hizo Obispo, cuando San Pedro murió se eligió como Obispo de Roma, es decir Maestro y Pastor de toda la Iglesia y sucesor de San Pedro a San Lino, con la fin de San Lino se eligió como Obispo de Roma, es decir Maestro y Pastor de toda la Iglesia y sucesor de San Pedro, a San Cleto y cuando este murió se eligió a San Clemente como Obispo de Roma, es decir Maestro y Pastor de toda la Iglesia y sucesor de San Pedro, que escribió una carta a los Corintios que usted se niega a leer a ponerlos en orden, donde habla de la jerarquía eclesiástica, que las formas, ritos y ministerios que hay que hacer y cuando hay que hacerlos y quienes deben hacerlos, fue el mismo Verbo hecho carne quien los mandó hacer y que si no hacen caso a la Iglesia de Roma que tiene soberanía sobre todas las demás caen en pecado gravísimo (podríamos decir de Cisma) y peligro de fin (no salvación eterna) por desobediencia.
 
Última edición:
El Papado, el episcopado y el presbiterado es Bíblico.
 
Cristo es la piedra desechada por los constructores que ha venido a ser la piedra angular, Pedro es piedra edificante.


EL PAPADO Y LAS SAGRADAS ESCRITURAS

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“Y yo te digo a ti que tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y las puertas del infierno no prevalecerán contra ella. Yo te daré las llaves del reino de los cielos, y cuanto atares sobre la tierra será atado en los cielos, y cuanto desatares sobre la tierra será desatado en los cielos”.
Mateo 16, 18-19

"et ego dico tibi quia tu es Petrus et super hanc petram ædificabo ecclesiam meam et portæ inferi non prævalebunt adversum eam"
Evangelium secundum Matthaeum, 16

“Simón, Simón, mira que Satanás os busca para zarandearos como se hace con el trigo. Pero Yo he rogado por ti, a fin de que tu fe no desfallezca. Y tú, una vez convertido, confirma a tus hermanos”.
Lucas 22, 31-32

“Yo soy el buen pastor. El buen pastor da su vida por sus ovejas”.
Juan 10, 11


"A ti te daré las llaves del Reino de los Cielos; y lo que ates en la tierra quedará atado en los cielos, y lo que desates en la tierra quedará desatado en los cielos"
Mateo, 16

“Habiendo, pues, almorzado, Jesús dijo a Simón Pedro: ‘Simón, hijo de Juan, ¿me amas tú más que éstos?’ Le respondió: ‘Sí, Señor, Tú sabes que yo te quiero’. Él le dijo: ‘Apacienta mis corderos’. Le volvió a decir por segunda vez: ‘Simón, hijo de Juan, ¿me amas?’ Le respondió: ‘Sí, Señor, Tú sabes que te quiero’. Le dijo: ‘Pastorea mis ovejas’. Por tercera vez le preguntó: ‘Simón, hijo de Juan, ¿me quieres?’ Se entristeció Pedro de que por tercera vez le preguntase: ‘¿Me quieres?’, y le dijo: ‘Señor, Tú lo sabes todo. Tú sabes que yo te quiero’. Jesús le dijo: ‘Apacienta mis ovejas’”.
Juan 21, 15-17

“Los nombres de los doce apóstoles son éstos: el primero, Simón, llamado Pedro...”.
Mateo 10, 2
“Después de una larga discusión, se levantó Pedro y les dijo: ‘Hermanos, vosotros sabéis cómo, desde los primeros días, Dios me eligió en medio de vosotros para que por mi boca oyesen los gentiles la palabra del Evangelio y creyesen’”.
Hechos 15, 7

"Dicho esto, sopló sobre ellos y les dijo: «Recibid el Espíritu Santo.
A quienes perdonéis los pecados, les quedan perdonados; a quienes se los retengáis, les quedan retenidos.»"

Juan, 20

"«Yo os aseguro: todo lo que atéis en la tierra quedará atado en el cielo, y todo lo que desatéis en la tierra quedará desatado en el cielo."
Mateo, 18

Quien a vosotros os escucha, a mí me escucha; y quien a vosotros os rechaza, a mí me rechaza; y quien me rechaza a mí, rechaza al que me ha enviado.»"
Lucas, 10

"Os exhorto, pues, yo, preso por el Señor, a que viváis de una manera digna de la vocación con que habéis sido llamados,

con toda humildad, mansedumbre y paciencia, soportándoos unos a otros por amor,

poniendo empeño en conservar la unidad del Espíritu con el vínculo de la paz.

Un solo Cuerpo y un solo Espíritu, como una es la esperanza a que habéis sido llamados.

Un solo Señor, una sola fe, un solo bautismo,

un solo Dios y Padre de todos, que está sobre todos, por todos y en todos.

A cada uno de nosotros le ha sido concedido el favor divino a la medida de los dones de Cristo.

Por eso dice: Subiendo a la altura, llevó cautivos y dio dones a los hombres.

¿Qué quiere decir «subió» sino que también bajó a las regiones inferiores de la tierra?

Este que bajó es el mismo que subió por encima de todos los cielos, para llenarlo todo.

El mismo «dio» a unos el ser apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelizadores; a otros, pastores y maestros,

para el recto ordenamiento de los santos en orden a las funciones del ministerio, para edificación del Cuerpo de Cristo,

hasta que llegemos todos a la unidad de la fe y del conocimiento pleno del Hijo de Dios, al estado de hombre perfecto, a la madurez de la plenitud de Cristo.

Para que no seamos ya niños, llevados a la deriva y zarandeados por cualquier viento de doctrina, a merced de la malicia humana y de la astucia que conduce engañosamente al error,

antes bien, siendo sinceros en el amor, crezcamos en todo hasta Aquel que es la Cabeza, Cristo,

de quien todo el Cuerpo recibe trabazón y cohesión por medio de toda clase de junturas que llevan la nutrición según la actividad propia de cada una de las partes, realizando así el crecimiento del cuerpo para su edificación en el amor."

Efesios, 4






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1 Crónicas 28, 4: “Y el Señor, el Dios de Israel, me eligió de toda la casa de mi padre para ser rey sobre Israel por los siglos...”.

Hechos 15, 7: “Después de una larga discusión, se levantó Pedro y les dijo: ‘Hermanos, vosotros sabéis cómo, desde los primeros días, Dios me eligió en medio de vosotros para que por mi boca oyesen los gentiles la palabra del Evangelio y creyesen’”.


Isaías 22, 20-22: “Y en aquel día llamaré yo a mi siervo Eliaquim, hijo de Helicías, y le vestiré de tu túnica y le ceñiré de tu cinturón, y pondré en sus manos tu poder. Y él será un padre para los habitantes de Jerusalén y para la casa de Judá. Y pondré sobre su hombro la llave de la casa de David; abrirá, y no habrá quien pueda cerrar; cerrará, y no habrá quien pueda abrir”.

Mateo 16, 18-19: “Y yo te digo a ti que tú eres Pedro, y sobre esta piedra Yo edificaré mi Iglesia, y las puertas del infierno no prevalecerán contra ella. Yo te daré las llaves del reino de los cielos, y cuanto atares sobre la tierra será atado en los cielos, y cuanto desatares sobre la tierra será desatado en los cielos”.


San Pablo se juega la vida para conocer en exclusiva a San Pedro
"17.sin subir a Jerusalén donde los apóstoles anteriores a mí, me fui a Arabia, de donde nuevamente volví a Damasco.
18.Luego, de allí a tres años, subí a Jerusalén para conocer a Cefas ( Κηφᾶς ) y permanecí quince días en su compañía."
Gálatas, 1



Cristo distinguió desde un principio al apóstol San Pedro entre todos los demás apóstoles. Cuando le encontró por primera vez, le anunció que cambiaría su nombre de Simón por el de Cefas = roca : «Tú eres Simón, el hijo de Juan [Vg: de Jonás] ; tú serás llamado Cefas» (Ioh 1, 42; cf. Mc 3, 16). El nombre de Cefas indica claramente el oficio para el cual le ha destinado el Señor (cf. Mt 16, 18). En todas las menciones de los apóstoles, siempre se cita en primer lugar a Pedro. En Mt se le llama expresamente «el primero» (Mt 10, 2). Como, según el tiempo de la elección, Andrés precedía a Pedro, el hecho de aparecer Pedro en primer lugar indica su oficio de primado. Pedro, juntamente con Santiago y Juan, pudo ser testigo de la resurrección de la hija de Jairo (Mc 5, 37), de la transfiguración (Mt 17, 1) y de la agonía del Huerto (Mt 26, 37). El Señor predica a la multitud desde la barquilla de Pedro (Lc 5, 3), paga por sí mismo y por él el tributo del templo (Mt 17, 27), le exhorta a que, después de su propia conversión, corrobore en la fe a sus hermanos (Lc 22, 32); después de la resurrección se le aparece a él solo antes que a los demás apóstoles (Lc 24, 34; 1 Cor 15, 5).

A San Pedro se le prometió el primado después que hubo confesado solemnemente, en Cesarea de Filipo, la mesianidad de Cristo. Díjole el Señor (Mt 16, 17-19) : «Bienaventurado tú, Simón, hijo de Jonás, porque no es la carne ni la sangre quien eso te ha revelado, sino mi Padre, que está en las cielos. Y yo te digo a ti que tú eres Pedro [= Cefas], y sobre esta roca edificaré yo mi Iglesia, y las puertas dei infierno no prevalecerán contra ella. Yo te daré las llaves del reino de los cielos, y cuanto atares en la tierra será atado en los cielos, y cuanto desatares en la tierra será desatado en los cielos». Estas palabras se dirigen inmediata y exclusivamente a San Pedro. Ponen ante su vista en tres imágenes la idea del poder supremo en la nueva sociedad (boúoría) que Cristo va a fundar. Pedro dará a esta sociedad la unidad y firmeza inquebrantable que da a una casa el estar asentada sobre roca viva ; cf. Mt 7, 24 s. Pedro ha de ser también el poseedor de las llaves, es decir, el administrador del reino de Dios en la tierra ; cf. Is 22, 22 ; Apoc 1, 18; 3, 7: las llaves son el símbolo del poder y la soberanía. A él le incumbe finalmente atar y desatar, es decir (según la terminología rabínica) : lanzar la excomunión o levantarla, o también interpretar la ley en el sentido de que una cosa está permitida (desatada) o no (atada). De acuerdo con Mt 18, 18, donde se concede a todos los apóstoles el poder de atar y desatar en el sentido de excomulgar o recibir en la comunidad a los fieles, y teniendo en cuenta la expresión universal («cuanto atares... cuanto desatares»), no es lícito entender que el pleno poder concedido a San Pedro se limita al poder de enseñar, sino que resulta necesario extenderlo a todo el ámbito del poder de jurisdicción. Dios confirmará en los cielos todas las obligaciones que imponga o suprima San Pedro en la tierra.

Contra todos los intentos por declarar este pasaje (que aparece únicamente en San Mateo) como total o parcialmente interpolado en época posterior, resalta su autenticidad de manera que no deja lugar a duda. Asta se halla garantizada, no sólo por la tradición unánime con que aparece en todos los códices y versiones antiguas, sino también por el colorido semítico del texto, que salta bien a la vista. No es posible negar cón razones convincentes que estas palabras fueron pronunciadas por el Señor mismo. No es posible mostrar tampoco que se hallen en contradicción con otras enseñanzas y hechos referidos en el Evangelio.

El primado se lo concedió el Señor a Pedro cuando, después de la resurrección, le preguntó tres veces si le amaba y le hizo el siguiente encargo : «Apacienta mis corderos, apacienta mis corderos, apacienta mis ovejas» (Ioh 21, 15-17). Estas palabras, lo mismo que las de Mt 16, 18 s, se refieren inmediata y exclusivamente a San Pedro. Los «corderos» y las «ovejas» representan todo el rebaño de Cristo, es decir, toda la Iglesia; cf. Ioh 10. «Apacentar», referido a hombres, significa lo mismo que gobernar (cf. Act 20, 28), según la terminología de la antigüedad profana y bíblica. Pedro, por este triple encargo de Cristo, no quedó restaurado en su oficio apostólico (pues no lo había perdido por su negación), sino que recibió el supremo poder gubernativo sobre toda la Iglesia.

Después de la ascensión a los cielos, Pedro ejerció su primado. Desde el primer momento ocupa en la comunidad primitiva un puesto preeminente : Dispone la elección de Matías (Act 1, 15 ss) ; es el primero en anunciar, el día de Pentecostés, el mensaje de Cristo, que es el Mesías muerto en la cruz y resucitado (2, 14 ss) ; da testimonio del mensaje de Cristo delante del sanedrín (4, 8 ss) ; recibe en la Iglesia a'l primer gentil: el centurión Cornelio (10, 1 ss); es el primero en hablar en el concilio de los apóstoles (15, 17 ss) ; San Pablo marcha a Jerusalén «para conocer a Cefas» (Gal 1, 18).




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Tradición Católica
Juan 21,25
Lucas 10,13-16
Mateo 16, 18-20
Hechos 2, 47

Hechos 11, 26
: “Donde por espacio de un año estuvieron juntos en la iglesia e instruyeron a una muchedumbre numerosa, tanto que en Antioquía comenzaron los discípulos a llamarse ‘cristianos’”.
"et annum totum conversati sunt in ecclesia et docuerunt turbam multam ita ut cognominarentur primum Antiochiæ discipuli Christiani"


CLEMENTE I DE ROMA:
Clemente
investido obispo por el mismo San Pedro
y nombrado en las sagradas Escrituras por San Pablo como colaborador suyo en Filipenses 4,3

"3.También te ruego a ti, Sícigo, verdadero «compañero», que las ayudes, ya que lucharon por el Evangelio a mi lado, lo mismo que Clemente y demás colaboradores míos, cuyos nombres están en el libro de la vida."
Filipenses, 4

Clemente I de Roma, carta a los Corintios año 96, estando VIVOEL DISCÍPULO AMADO SAN JUAN EVANGELISTA:

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Clemente I de Roma, carta a los Corintios año 96.


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TERTULIANO dice de la Iglesia : «Fue edificada sobre él» (De inonog. 8)

SAN CIPRIANO dice, refiriéndose a Mt 16, 18 s : «Sobre uno edifica la Iglesia» (De unit. eccl. 4)

CLEMENTE DE ALEJANDRÍA en Quis dives salvetur llama a San Pedro
"el elegido, el escogido, el primero entre los discípulos, el único por el cual, además de por sí mismo, pagó tributo el Señor"

SAN CIRILO DE JERUSALÉN le llama «el sumo y príncipe de los apóstoles» Cut. 2, 19

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Canon 890,891,892 Catecismo Mayor de San Pio X

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Última edición:
Me parece que a lo que se refiere @Esta democracia es falsa, no es a la esclavitud física sino a la "jovenlandesal del esclavo" expresada por Nietzsche.
El cristianismo es totalmente fiel a la filosofía platónica (“platonismo para el pueblo”, dice Nietzsche, filosofía platónica expresada en términos sencillos y accesibles a todo el mundo). Con el cristianismo las ideas que antes estaban presentes en un reducido número de personas, los filósofos, se extienden a todos los hombres. El dualismo ontológico, el dualismo antropológico (una tesis particular en el marco general del dualismo ontológico) pasan a ser de dominio público. El mundo inteligible de Platón pasa a ser lo Infinito o mundo divino, el mundo sensible el mundo terrenal, el alma se opone al cuerpo. Distintas palabras para, en el fondo, las mismas ideas. El cristianismo influirá en la filosofía puesto que, opina Nietzsche, todos los filósofos son en el fondo teólogos. Con el cristianismo comienza la jovenlandesal de los esclavos.
El platonismo o creencia en la existencia de un Mundo Verdadero, Objetivo, Bueno, Eterno, Racional, Inmutable, y el desprecio de las categorías de la vida (el cuerpo, la sexualidad, la temporalidad, el cambio, la multiplicidad e individualidad,...) Una jovenlandesal que santifica la represión de los sentidos

Nietzsche no era católico, con lo cual, su criterio sobre el cristianismo se fundamenta en lo que conoce de los protestantes y su platonismo, desde los cuales, muchos ávidos lectores de la "liberación" han entendido que su perspectiva cristiana abarcaba necesariamente a todo el cristianismo, incluido el Catolicismo, que para nada "es esencialmente platónico", sino aristotélico... La razón de Sto. Tomás de Aquino, frente a "la fruta razón" de Lutero.

Efectivamente, si al cristianismo le quitas la racionalidad de Sto. Tomás, se vuelve puro misterio y las mentes más proclives o necesitadas de crear un mundo "elevado", no encontrarán en estar pisando el suelo ningún obstáculos a sus ensueños. Lean a Sta. Teresa y vuelvan a contarnos sus "vehemencias platónicas". Es un reto.

Es por la razón que es posible justificar la unidad del hombre en su cuerpo y en su espíritu. Es fuera de la razón donde se cuece a fuego lento esa dualidad inconciliable que usted menciona.

En sentido estricto, Nietzsche está hablando de lo que conoce y es el luteranismo, pero como procede del cristianismo, tiene la "deferencia" de no mencionarlo y de ese modo, cualquiera que lo lea, incluso si es católico de formación, creerá que se está refiriendo a su propia Fe o a la de sus mayores.

¿Conocía Nietzsche a fondo el Catolicismo como supongo conocería el protestantismo luterano? Lo dudo. Por lo tanto, cuando habla de "cristianismo" está ocurriendo una cosa notable: está ignorando al catolicismo y al mismo tiempo estoy seguro que la imagen súbita que emerge en la mente del común de sus lectores ante sus sentencias anticristianas, es la de Roma, El Papa y el catolicismo. El milagro está servido: convirtió el vino en agua, o peor, en vinagre...

Los "ilustrados" del sur de la Europa Católica tragándose las ruedas de molino de un pesimista protestante rendido ante la vida y corriendo en brioso corcel hacia la decadencia complaciente...

¿No hay una manifestación de autoesclavitud indecente en ese adoptar cualquier pensamiento cuyo transfondo jovenlandesal y teológico desconoce por encontrar en él latigazos constantes al pensamiento cristiano, éste si necesariamente católico?.

En el mundo de los ideales es fácil imaginarse a uno mismo libre de toda servidumbre. Pero la realidad se impone y siempre habrá un señor -estado, jefe, autoridad reconocida, superioridad intelectual o física, veteranía, privilegio...- al que servir si uno quiere medrar en la realidad por más que pretenda seguir siendo libre en sus sueños... Un cristiano que acepta al Señor, al Rey de Reyes como autoridad suprema, ve con otros ojos y siente de otra manera la presencia y el dictado de los señores de la tierra. No es el martirio de miles de cristianos un símbolo de cobardía y achantamiento. Al contrario, es símbolo de fortaleza "total" por una sencilla razón que tal vez Nietzsche no les explicó: los más parecido a la verdad es aquello por lo que uno estaría dispuesto a dar su vida. Ningún valor -conocimiento, anhelo, razón, sentimiento, costumbre- merece un reconocimiento extraordinario si no es capaz de sobreponerse al temor de perder la vida. Mientras vivimos podemos cambiar de opinión miles de veces y de conferir a las ideas un valor que luego no lo es tanto. Con el sacrificio consciente estamos diciendo que no hay vuelta atrás y que nuestra vida, con ser nuestro tesoro, palidece en importancia ante lo que se cree. ¿Qué jovenlandesal de esclavo es ésa?

Miran al dedo (de Nietzsche) y no ven ni su alma ni su intención. Dice lo que muchos quieren escuchar y con eso es suficiente para ellos, que presumen luego de ser gente leída e informada pero apenas alcanzan a superar al conejo deslumbrado y quieto en la carretera viendo cómo dos luces intensísimas vienen a toda velocidad a su encuentro...

La arrogancia es mala para todos pues impulsa a jugar una partida sin tener la seguridad de que se tienen las mejores cartas. Y precisamente, quien tiene sus esperanzas en un reino que no es de este mundo, no teme los excesos de arrogancia ni las amenazas de otros hombres que con todo su poder no son más pero sí mucho menos que el Señor que está en el Cielo. Bueno, si las teme, pero no se rinde ante ellas. No hay mayor esclavitud que la de temer perder el único valor que se posee, sea la tranquilidad, el dinero, el poder o la vida. Puede usted pensar en Nietzsche por la noche en sus ratos de esparcimiento, pero la realidad toma el control en cuanto sale de casa. Esa sí que es una dualidad cercana que no necesita de la incisiva clarividencia de un loco.
 
Con el cristianismo comienza la jovenlandesal de los esclavos.
El platonismo o creencia en la existencia de un Mundo Verdadero, Objetivo, Bueno, Eterno, Racional, Inmutable, y el desprecio de las categorías de la vida (el cuerpo, la sexualidad, la temporalidad, el cambio, la multiplicidad e individualidad,...) Una jovenlandesal que santifica la represión de los sentidos

Muy interesante tu post steppenwulf.

Si bien el tema -supuestamente- iba de "historia" y no de "teología" (cosa a la que se está derivando como no podía ser de otro modo) me gustaría hacer algunas precisiones:

1) Es claro que para quien piensa que es un "espíritu" encerrado en un "cuerpo físico", lo importante es lo espiritual y no lo material o físico.

2) Es claro también que, para un poderoso interesado en controlar la MATERIA, que pueda someter a otros sin que se rebelen mucho porque se ocupan más de su "espíritu" que de su "físico" no deja de ser muy interesante. Si fueran "rebeldes" someterlos es más caro. Sin son "espirituales" aceptarán con más calma las privaciones, la pobreza y las órdenes.

3) TODAS LAS RELIGIONES en la medida en que se ocupan más de lo espiritual que de lo físico son, desde esa perspectiva, funcionales a los PODEROSOS DE LA MATERIA que pueden obtener todo lo que quieren sin grandes oposiciones o revoluciones por parte de aquellos que están más atentos a lo espiritual que a lo material.

No en vano Marx calificaba a las religiones como "el Opio de los Pueblos" (porque los hacía más bien mansos y tranquilos frente a la opresión de los poderosos).

Hasta aquí, claro.

Pero la gran pregunta es: ¿Existe o no un mundo espiritual? ¿Trascendemos los hombres -en nuestra naturaleza espiritual- nuestro "yo" físico?

Si la respuesta es NO... entonces estamos frente a una herramienta de control y esclavitud.

Si la respuesta es SI... entonces estamos frente a un conocimiento TRASCENDENTE Y SUPERIOR que nos permite pasar por el crisol del "mundo físico" con la calma y la tranquilidad de saber que no es sino un MERO INSTANTE del total de nuestra existencia (el espíritu es eterno, el cuerpo pasajero y la vida terrenal es apenas un soplo en la magnitud de nuestra existencia espiritual).

Dado que esto es una perspectiva individual (tenemos libre albedrío para decidir nuestra postura), estarán quienes crean que no existe nada más que lo físico -y entonces hay que aprovecharse de los otros todo lo posible porque es lo único que cuenta- y estarán quienes creemos en diferentes estados de existencia y nos moveremos con más calma frente a los avatares del mundo físico.

Es un puya despectiva considerar "esclavos" a quienes creen en la trascendencia, pero es lo habitual en los debates... el que no piensa como yo está "equivocado" y, si quiero desmerecerlo y disminuirlo y deshumanizarlo, puedo aplicar calificativos infamantes para sentirme más cómodo y seguro en mi posición.
 
Me parece que a lo que se refiere @Esta democracia es falsa, no es a la esclavitud física sino a la "jovenlandesal del esclavo" expresada por Nietzsche.
El cristianismo es totalmente fiel a la filosofía platónica (“platonismo para el pueblo”, dice Nietzsche, filosofía platónica expresada en términos sencillos y accesibles a todo el mundo). Con el cristianismo las ideas que antes estaban presentes en un reducido número de personas, los filósofos, se extienden a todos los hombres. El dualismo ontológico, el dualismo antropológico (una tesis particular en el marco general del dualismo ontológico) pasan a ser de dominio público. El mundo inteligible de Platón pasa a ser lo Infinito o mundo divino, el mundo sensible el mundo terrenal, el alma se opone al cuerpo. Distintas palabras para, en el fondo, las mismas ideas. El cristianismo influirá en la filosofía puesto que, opina Nietzsche, todos los filósofos son en el fondo teólogos. Con el cristianismo comienza la jovenlandesal de los esclavos.
El platonismo o creencia en la existencia de un Mundo Verdadero, Objetivo, Bueno, Eterno, Racional, Inmutable, y el desprecio de las categorías de la vida (el cuerpo, la sexualidad, la temporalidad, el cambio, la multiplicidad e individualidad,...) Una jovenlandesal que santifica la represión de los sentidos


El catolicismo es un realismo.
El ser es existir.
Y es hilemórfico.

El origenismo es una herejía condenada en el Segundo Concilio de Constantinopla (553)

El Padre de Nietzsche era un pastor Luterano y este hablaría por el mismo y su concepción del luteranismo y nada más.

León XIII contemporaneo a Nietzsche encíclica AETERNI PATRIS dedicada en exclusiva a Santo Tomás, doctrina que debe ser la base de toda filosofía que se tenga por cristiana

Un fragmento:

Entre los Doctores escolásticos brilla grandemente Santo Tomás de Aquino, Príncipe y Maestro de todos, el cual, como advierte Cayetano, «por haber venerado en gran manera los antiguos Doctores sagrados, obtuvo de algún modo la inteligencia de todos»[25]. Sus doctrinas, como miembros dispersos de un cuerpo, reunió y congregó en uno Tomás, dispuso con orden admirable, y de tal modo las aumentó con nuevos principios, que con razón y justicia es tenido por singular apoyo de la Iglesia católica; de dócil y penetrante ingenio, de memoria fácil y tenaz, de vida integérrima, amador únicamente de la verdad, riquísimo en la ciencia divina y humana, comparado al sol, animó al mundo con el calor de sus virtudes, y le iluminó con esplendor. No hay parte de la filosofía que no haya tratado aguda y a la vez sólidamente: trató de las leyes del raciocinio, de Dios y de las substancias incorpóreas, del hombre y de otras cosas sensibles, de los actos humanos y de sus principios, de tal modo, que no se echan de menos en él, ni la abundancia de cuestiones, ni la oportuna disposición de las partes, ni la firmeza de los principios o la robustez de los argumentos, ni la claridad y propiedad del lenguaje, ni cierta facilidad de explicar las cosas abstrusas.

Añádese a esto que el Doctor Angélico indagó las conclusiones filosóficas en las razones y principios de las cosas, los que se extienden muy latamente, y encierran como en su seno las semillas de casi infinitas verdades, que habían de abrirse con fruto abundantísimo por los maestros posteriores. Habiendo empleado este método de filosofía, consiguió haber vencido él solo los errores de los tiempos pasados, y haber suministrado armas invencibles, para refutar los errores que perpetuamente se han de renovar en los siglos futuros. Además, distinguiendo muy bien la razón de la fe, como es justo, y asociándolas, sin embargo amigablemente, conservó los derechos de una y otra, proveyó a su dignidad de tal suerte, que la razón elevada a la mayor altura en alas de Tomás, ya casi no puede levantarse a regiones más sublimes, ni la fe puede casi esperar de la razón más y más poderosos auxilios que los que hasta aquí ha conseguido por Tomás.

Por estas razones, hombres doctísimos en las edades pasadas, y dignísimos de alabanza por su saber teológico y filosófico, buscando con indecible afán los volúmenes inmortales de Tomás, se consagraron a su angélica sabiduría, no tanto para perfeccionarle en ella, cuanto para ser totalmente por ella sustentados. Es un hecho constante que casi todos los fundadores y legisladores de las órdenes religiosas mandaron a sus compañeros estudiar las doctrinas de Santo Tomás, y adherirse a ellas religiosamente, disponiendo que a nadie fuese lícito impunemente separarse, ni aun en lo más mínimo, de las huellas de tan gran Maestro. Y dejando a un lado la familia dominicana, que con derecho indisputable se gloria de este su sumo Doctor, están obligados a esta ley los Benedictinos, los Carmelitas, los Agustinos, los Jesuitas y otras muchas órdenes sagradas, como los estatutos de cada una nos lo manifiestan.

Y en este lugar, con indecible placer recuerda el alma aquellas celebérrimas Academias y escuelas que en otro tiempo florecieron en Europa, a saber: la parisiense, la salmanticense, la complutense, la duacense, la tolosana, la lovaniense, la patavina, la boloniana, la napolitana, la coimbricense y otras muchas. Nadie ignora que la fama de éstas creció en cierto modo con el tiempo, y que las sentencias que se les pedían cuando se agitaban gravísimas cuestiones, tenían mucha autoridad entre los sabios. Pues bien, es cosa fuera de duda que en aquellos grandes emporios del saber humano, como en su reino, dominó como príncipe Tomás, y que los ánimos de todos, tanto maestros como discípulos, descansaron con admirable concordia en el magisterio y autoridad del Doctor Angélico.

Pero lo que es más, los Romanos Pontífices nuestros predecesores, honraron la sabiduría de Tomás de Aquino con singulares elogios y testimonios amplísimos. Pues Clemente VI[26], Nicolás V [27], Benedicto XIII [28] y otros, atestiguan que la Iglesia universal es ilustrada con su admirable doctrina; San Pío V [29], confiesa que con la misma doctrina las herejías, confundidas y vencidas, se disipan, y el universo mundo es libertado cotidianamente; otros, con Clemente XII[30], afirman que de sus doctrinas dimanaron a la Iglesia católica abundantísimos bienes, y que él mismo debe ser venerado con aquel honor que se da a los Sumos Doctores de la Iglesia Gregorio, Ambrosio, Agustín y Jerónimo; otros, finalmente, no dudaron en proponer en las Academias y grandes liceos a Santo Tomás como ejemplar y maestro, a quien debía seguirse con pie firme. Respecto a lo que parecen muy dignas de recordarse las palabras del B. Urbano V: «Queremos, y por las presentes os mandamos, que adoptéis la doctrina del bienaventurado Tomás, como verídica y católica, y procuréis ampliarla con todas vuestras fuerzas»[31]. Renovaron el ejemplo de Urbano en la Universidad de estudios de Lovaina Inocencio XII[32], y Benedicto XIV[33], en el Colegio Dionisiano de los Granatenses. Añádase a estos juicios de los Sumos Pontífices, sobre Tomás de Aquino, el testimonio de Inocencio VI, como complemento: «La doctrina de éste tiene sobre las demás, exceptuada la canónica, propiedad en las palabras, orden en las materias, verdad en las sentencias, de tal suerte, que nunca a aquellos que la siguieren se les verá apartarse del camino e la verdad, y siempre será sospechoso de error el que la impugnare»[34].

También los Concilios Ecuménicos, en los que brilla la flor de la sabiduría escogida en todo el orbe, procuraron perpetuamente tributar honor singular a Tomás de Aquino. En los Concilios de Lyón, de Viene, de Florencia y Vaticano, puede decirse que intervino Tomás en las deliberaciones y decretos de los Padres, y casi fue el presidente, peleando con fuerza ineluctable y faustísimo éxito contra los errores de los griegos, de los herejes y de los racionalistas. Pero la mayor gloria propia de Tomás, alabanza no participada nunca por ninguno de los Doctores católicos, consiste en que los Padres tridentinos, para establecer el orden en el mismo Concilio, quisieron que juntamente con los libros de la Escritura y los decretos de los Sumos Pontífices se viese sobre el altar la Suma de Tomás de Aquino, a la cual se pidiesen consejos, razones y oráculos.
 
Roma manda. Eso no es discutible. El problema es cuando en la sede apostólica hay algún majadero como el actual Papa Rojo. Esperemos que Dios no permita que dure mucho antes de que el daño sea grave.
 
Si bien el tema -supuestamente- iba de "historia" y no de "teología"
El OP de manera tramposa inicia el hilo con una genuina pregunta de índole histórica, adecuada para este foro donde se debaten hechos de la Historia. Pero luego deriva el hilo hacia lo que realmente pretendía: desarrollar proselitismo religioso. Muy adecuado al cambalache que se ha convertido Burbuja.:mad
 
Última edición:
Un Papa no deja de ser un hombre más, aunque se le suponga una autoridad en la Fe.

Falso.

Un solo ejemplo:


Papa Pelagio II Carta Apostólica Quod ad Dilectionem ; Denz. 246:
Sabéis, en efecto, que el Señor clama en el Evangelio: Simón, Simón, mira que Satanás os ha pedido para cribaros como trigo; pero yo he rogado por ti a mi Padre, para que no desfallezca tu fe, y tú, convertido, confirma a tus hermanos [Lc. 22, 31 s].[/QUOTE]
Considerad, carísimos, que la Verdad no pudo mentir, ni la fe de Pedro podrá eternamente conmoverse o mudarse. Porque como el diablo hubiera pedido a todos los discípulos para cribarlos, por Pedro solo atestigua el Señor haber rogado y por él quiso que los demás fueran confirmados. A él también, en razón del mayor amor que manifestaba al Señor en comparación de los otros, le fué encomendado el cuidado de apacentar las ovejas [cf. Ioh. 21, 15 ss]; a él también le entregó las llaves del reino de los cielos, le prometió que sobre él edificaría su Iglesia y le atestiguó que las puertas del infierno no prevalecerían contra ella [Mt. 16, 16 ss]. Mas como quiera que el enemigo del género humano no cesa hasta el fin del mundo de sembrar la cizaña encima de la buena semilla para daño de la Iglesia de Dios [Mt. 13, 25], de ahí que para que nadie, con maligna intención, presuma fingir o 'argumentar nada sobre la integridad de nuestra fe y por ello tal vez parezca que se perturban vuestros espíritus, hemos juzgado neesario, no sólo exhortaras con lágrimas por la presente Carta a que volváis al seno de la progenitora Iglesia, sino también enviaros satisfacción sobre la integridad de nuestra fe...
 
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