Un amigo mío, bueno mejor dicho amigo de amigos, lleva un tiempo con una vida de querida progenitora sin dar un pao al agua. La historia es esta...
A los 18 años dejó el colegio, sin la ESO. Se metió al andamio e hizo pasta durante 5 o 6 años, que gastó en copitas, gimnasios de nivel, gasolina hasta para ir a por el pan, tapitas a diario, moto grande, coche...La vida loca. Todo esto, viviendo con su progenitora y con dinero de su padre también (divorciados)
La cosa empezó a torcerse con el estallido de la burbuja. Le echaron del curro, fue de trabajo en trabajo, a menudo en neցro, hasta que en una mala racha decidió ponerse a cobrar el paro. Se lo tomó como unas vacaciones, ''ej que la cosa esta mu mal''. Pero con ahorros y el paro, vivía igual o incluso mejor, se fundió los ahorros en un quad y un tuneo del buga. El paro se acabó...Y no sé cómo, empezó a cobrar los famosos 400.
Digo que no sé cómo, porque es hijo único, su progenitora tiene trabajo (una media jornada, pero algo es algo) y su padre le pasa un dinero mensual. Viven en una muy buena zona y tienen propiedades inmobiliarias (casa en el pueblo+su piso en la ciudad en propiedad). No tiene cargas familiares, ni minusvalía, ni nada. 400 euros para sus vicios.
Ya no busca empleo, directamente. Desde abril a noviembre se va a vivir al pueblo y cuando no está durmiendo está en el bar. El resto del tiempo, está como un vegetal en su casa, sólo gasta en tabaco (poco) y cuando sale los findes. Eso sí, no le faltan los viajecitos, al menos uno al mes: especialmente si hay nieve ahí va. Pero ojo, que no faltan compritas en Londres o las excursioncitas de paella, mariscada, chuletones...Comilonas y ski, pero de formarse, aprender idiomas, reciclarse profesionalmente, nada. Para qué.
No os confundáis, no me joroba que gaste su dinero como quiera. ¿Envidia? Qun poco sí. Pero realmente lo malo es que lo han convertido en un ser dependiente al máximo, un gandul que no volverá a trabajar mientras pueda vivir a costa del Estado y de sus padres sin hacerlo. No digo que no sean necesarios algunos subsidios para gente en situación límite ni que todo tenga que pagarlo la familia, pero SI NO TIENES TRABAJO NI DINERO, LO LÓGICO ES QUE LLEVES UNA VIDA MODESTA MIENTRAS TE SALE ALGO. Con 100 euros por semana y lo que le dan los padres vive mejor que cualquier currito, sin pagar alquiler, comida, facturas...Limpios.
Hasta podría perdonarle que viviese de mis impuestos sin dar un palo al agua, total, uno más, a este al menos lo conozco. Pero me puede su fruta demagogia sociata, su rencor hacia autónomos y pequeños empresarios ''porque defraudan mucho'', me joroba que se convirtiera en uno de los cabecillas del 15 m de mi ciudad hablando de lucha de clase, conciencia obrera y demás clichés.
Lo que encendió mi cabreo especialmente fue un encontronazo del otro dia, por un comentario desafortunado por mi situación actual. Llevo dos meses trabajando para mi tío. El hombre tiene una empresita que llegó a los 8 empleados, ahora sólo está él, su hija y yo. Nos matamos a currar, días de 10 o 11 horas, incluso sábados, por sacarlo adelante. Está al borde de la ruina, comido por clientes que no pagan y administraciones y proveedores que no perdonan, con los nervios fatal, a lo que podríamos añadir que ya ha tenido algún aviso del corazón, no severo, pero sí fue un susto. En dos años ha decaído física y mentalmente, se le ve cansado, enjuto, con las cuencas de los ojos hundidas y sombrías por las noches de insomnio, en 2 años ha perdido casi todo el pelo, pese a llegar a la cincuentena con una espléndida cabellera cana. Es un tipo con ética, nunca necesitó enchufes ni látigos para lograr vivir cómodamente, pero sin muchos lujos. Una furgoneta de trabajo, un cochecito normal y otro vejestorio para los hijos. Su casa, un piso normalito comprado antes de la burbuja. Otro piso burbujeado pagado a tocateja, para los nenes, en la Seseña de turno. Nada espectacular en su patrimonio ni en su estilo de vida. ¿Su delito? Pagar salarios decentes, ser honrado con las deudas, no arrimarse a los corruptos ni ceder a chantajes a los que la competencia se prestaba. Quizás algunas decisiones no le salieron bien, pero es que le han chuleado socios, clientes y administraciones hasta acabar con su tradicional buen humor y convertirlo en un ser melancólico y taciturno.
Admiro a mi tío, y me da mucha pena que esté así un tipo emprendedor, buena persona y con unos bemoles como el Camp Nou de grandes. Lo he visto derrumbarse un par de veces, llorar como un niño ante la perspectiva de quedarse en paro con 50ymuchos, arruinado y con sus hijos en paro. En esos momentos, se me pone un nudo en la garganta que no se me va en días. No se merece esta cosa de suerte.
Bueno, me desvio del tema. Mi ''amigo'', el puñetero vago, se enteró de que mi tío aún no me ha pagado los dos meses que llevo con él. No me importa, pues tengo unos ahorros y vivo en casa de mis padres, me importa más aprender el oficio y echarle un cable a mi tío en un momento muy dolido. El cabrón de mi ''amigo'' empezó a reirse de mí, ''qué pardillo, trabajas gratis, tu tio se aprovecha de tí, seguro que se gasta tu sueldo en farlopa''. Fue un comentario muy desagradable, pero no el último: ''en los buenos tiempos seguro que jodía bien al currito ahora que se aguante él'' ''seguro que para el BMW y el chalet si que le llega'' ''por culpa de gente como tú que trabaja gratis los demás no tenemos trabajo''´. Sé que bromeaba, pero me puso de muuuuuy mala leche, mi mirada no mentía y otros amigos lo notaron, intentando calmar los ánimos con frases conciliadoras. Empecé a reprocharle su puñetero estilo de vida como quizás nadie lo había hecho, y no tardó en ponerse chulo y amenazar con pegarme una leche. Antes de que acabase sus amenazas, le rompí el botellín que me estaba tomando en la cabeza y me cagué en su querida progenitora. Quedó sangrando en el suelo (le dieron puntos), mis amigos nos separaron y nos llevaron a cada uno a su casa para evitar males mayores. Ni pudo devolvérmela.
A ese parásito me gusta la fruta le deseo la fin. Lamentable que currantes como mi tío tengan que remar por esta ralea vaga,prepotente y analfabeta, castuzos en miniatura que encima se permiten el lujo de dar lecciones jovenlandesales y políticas y despreciar el trabajo de los demás. puñetero país.
Del pizzo que le cobran a mi tío por ejercer su profesión, de los impuestos que pagan mis padres, de mi IVA, del dinero para ley de dependencia o sanidad, sale la pasta para pagarle a vagos, etnianos, máquinas de parir, castuzos, funcivagos corruptos e inmijetas (no todos los inmis lo son pero sí muchs, especialmente ciertas nacionalidades) una vida cojonuda, mejor que la de cualquier currante que gana con suerte un poco más a cambio de deslomarse y ser devorado por el estrés.
Este país no tiene sentido, no hay meritocracia, solo paracasta, peloteo, picardía malsana y superficialidad. Se desprecia al trabajador, al intelectual, al emprendedor, se premia al cani, al corrupto, al que pega el braguetazo. Pero es mí país y quiero luchar porque sea un sitio más habitable, aunque ya me faltan las fuerzas.
Si mi ''amigo'' está leyendo esto: me partirás la cara, pero no tendrás razón, puñetero fracasado cejijunto y gordaco. Y si te pasas, sé dónde vives y se me ocurren unas cuantas frutadas.
Ha sido mi desahogo. Comenten amistosamente, amigos. Me hierve la sangre.
A los 18 años dejó el colegio, sin la ESO. Se metió al andamio e hizo pasta durante 5 o 6 años, que gastó en copitas, gimnasios de nivel, gasolina hasta para ir a por el pan, tapitas a diario, moto grande, coche...La vida loca. Todo esto, viviendo con su progenitora y con dinero de su padre también (divorciados)
La cosa empezó a torcerse con el estallido de la burbuja. Le echaron del curro, fue de trabajo en trabajo, a menudo en neցro, hasta que en una mala racha decidió ponerse a cobrar el paro. Se lo tomó como unas vacaciones, ''ej que la cosa esta mu mal''. Pero con ahorros y el paro, vivía igual o incluso mejor, se fundió los ahorros en un quad y un tuneo del buga. El paro se acabó...Y no sé cómo, empezó a cobrar los famosos 400.
Digo que no sé cómo, porque es hijo único, su progenitora tiene trabajo (una media jornada, pero algo es algo) y su padre le pasa un dinero mensual. Viven en una muy buena zona y tienen propiedades inmobiliarias (casa en el pueblo+su piso en la ciudad en propiedad). No tiene cargas familiares, ni minusvalía, ni nada. 400 euros para sus vicios.
Ya no busca empleo, directamente. Desde abril a noviembre se va a vivir al pueblo y cuando no está durmiendo está en el bar. El resto del tiempo, está como un vegetal en su casa, sólo gasta en tabaco (poco) y cuando sale los findes. Eso sí, no le faltan los viajecitos, al menos uno al mes: especialmente si hay nieve ahí va. Pero ojo, que no faltan compritas en Londres o las excursioncitas de paella, mariscada, chuletones...Comilonas y ski, pero de formarse, aprender idiomas, reciclarse profesionalmente, nada. Para qué.
No os confundáis, no me joroba que gaste su dinero como quiera. ¿Envidia? Qun poco sí. Pero realmente lo malo es que lo han convertido en un ser dependiente al máximo, un gandul que no volverá a trabajar mientras pueda vivir a costa del Estado y de sus padres sin hacerlo. No digo que no sean necesarios algunos subsidios para gente en situación límite ni que todo tenga que pagarlo la familia, pero SI NO TIENES TRABAJO NI DINERO, LO LÓGICO ES QUE LLEVES UNA VIDA MODESTA MIENTRAS TE SALE ALGO. Con 100 euros por semana y lo que le dan los padres vive mejor que cualquier currito, sin pagar alquiler, comida, facturas...Limpios.
Hasta podría perdonarle que viviese de mis impuestos sin dar un palo al agua, total, uno más, a este al menos lo conozco. Pero me puede su fruta demagogia sociata, su rencor hacia autónomos y pequeños empresarios ''porque defraudan mucho'', me joroba que se convirtiera en uno de los cabecillas del 15 m de mi ciudad hablando de lucha de clase, conciencia obrera y demás clichés.
Lo que encendió mi cabreo especialmente fue un encontronazo del otro dia, por un comentario desafortunado por mi situación actual. Llevo dos meses trabajando para mi tío. El hombre tiene una empresita que llegó a los 8 empleados, ahora sólo está él, su hija y yo. Nos matamos a currar, días de 10 o 11 horas, incluso sábados, por sacarlo adelante. Está al borde de la ruina, comido por clientes que no pagan y administraciones y proveedores que no perdonan, con los nervios fatal, a lo que podríamos añadir que ya ha tenido algún aviso del corazón, no severo, pero sí fue un susto. En dos años ha decaído física y mentalmente, se le ve cansado, enjuto, con las cuencas de los ojos hundidas y sombrías por las noches de insomnio, en 2 años ha perdido casi todo el pelo, pese a llegar a la cincuentena con una espléndida cabellera cana. Es un tipo con ética, nunca necesitó enchufes ni látigos para lograr vivir cómodamente, pero sin muchos lujos. Una furgoneta de trabajo, un cochecito normal y otro vejestorio para los hijos. Su casa, un piso normalito comprado antes de la burbuja. Otro piso burbujeado pagado a tocateja, para los nenes, en la Seseña de turno. Nada espectacular en su patrimonio ni en su estilo de vida. ¿Su delito? Pagar salarios decentes, ser honrado con las deudas, no arrimarse a los corruptos ni ceder a chantajes a los que la competencia se prestaba. Quizás algunas decisiones no le salieron bien, pero es que le han chuleado socios, clientes y administraciones hasta acabar con su tradicional buen humor y convertirlo en un ser melancólico y taciturno.
Admiro a mi tío, y me da mucha pena que esté así un tipo emprendedor, buena persona y con unos bemoles como el Camp Nou de grandes. Lo he visto derrumbarse un par de veces, llorar como un niño ante la perspectiva de quedarse en paro con 50ymuchos, arruinado y con sus hijos en paro. En esos momentos, se me pone un nudo en la garganta que no se me va en días. No se merece esta cosa de suerte.
Bueno, me desvio del tema. Mi ''amigo'', el puñetero vago, se enteró de que mi tío aún no me ha pagado los dos meses que llevo con él. No me importa, pues tengo unos ahorros y vivo en casa de mis padres, me importa más aprender el oficio y echarle un cable a mi tío en un momento muy dolido. El cabrón de mi ''amigo'' empezó a reirse de mí, ''qué pardillo, trabajas gratis, tu tio se aprovecha de tí, seguro que se gasta tu sueldo en farlopa''. Fue un comentario muy desagradable, pero no el último: ''en los buenos tiempos seguro que jodía bien al currito ahora que se aguante él'' ''seguro que para el BMW y el chalet si que le llega'' ''por culpa de gente como tú que trabaja gratis los demás no tenemos trabajo''´. Sé que bromeaba, pero me puso de muuuuuy mala leche, mi mirada no mentía y otros amigos lo notaron, intentando calmar los ánimos con frases conciliadoras. Empecé a reprocharle su puñetero estilo de vida como quizás nadie lo había hecho, y no tardó en ponerse chulo y amenazar con pegarme una leche. Antes de que acabase sus amenazas, le rompí el botellín que me estaba tomando en la cabeza y me cagué en su querida progenitora. Quedó sangrando en el suelo (le dieron puntos), mis amigos nos separaron y nos llevaron a cada uno a su casa para evitar males mayores. Ni pudo devolvérmela.
A ese parásito me gusta la fruta le deseo la fin. Lamentable que currantes como mi tío tengan que remar por esta ralea vaga,prepotente y analfabeta, castuzos en miniatura que encima se permiten el lujo de dar lecciones jovenlandesales y políticas y despreciar el trabajo de los demás. puñetero país.
Del pizzo que le cobran a mi tío por ejercer su profesión, de los impuestos que pagan mis padres, de mi IVA, del dinero para ley de dependencia o sanidad, sale la pasta para pagarle a vagos, etnianos, máquinas de parir, castuzos, funcivagos corruptos e inmijetas (no todos los inmis lo son pero sí muchs, especialmente ciertas nacionalidades) una vida cojonuda, mejor que la de cualquier currante que gana con suerte un poco más a cambio de deslomarse y ser devorado por el estrés.
Este país no tiene sentido, no hay meritocracia, solo paracasta, peloteo, picardía malsana y superficialidad. Se desprecia al trabajador, al intelectual, al emprendedor, se premia al cani, al corrupto, al que pega el braguetazo. Pero es mí país y quiero luchar porque sea un sitio más habitable, aunque ya me faltan las fuerzas.
Si mi ''amigo'' está leyendo esto: me partirás la cara, pero no tendrás razón, puñetero fracasado cejijunto y gordaco. Y si te pasas, sé dónde vives y se me ocurren unas cuantas frutadas.
Ha sido mi desahogo. Comenten amistosamente, amigos. Me hierve la sangre.