¿ qué prefieres un cachorrillo o un perro de la perrera ?
Adoptar un perro adulto
Podemos elegir al animal, sabiendo ya cómo es en su etapa adulta, su grado de desarrollo físico, temperamento y carácter. Además, sobre estos últimos, sus cuidadores podrán asesorarnos con franqueza; dado que querrán asegurarse de que el nuevo dueño sean compatible con el animal y viceversa.
El perro adulto se muestra más tranquilo y apacible que cuando es cachorro. Además ya ha dejado atrás su fase destructiva.
Adoptar un perro adulto nos da la seguridad de que el perro está desparasitado, medicado y, en muchos casos, esterilizado.
Los cuidadores y voluntarios del refugio podrán aconsejarte con conocimiento de causa sobre el carácter del animal, gustos, costumbres y cuidados específicos.
Al adoptar un perro adulto nos convertimos para él en una especie de héroe o salvador. Además, salvamos la vida a 2 perros: al adoptado y al que ocupará su puesto a la espera de ser rescatado.
Es muy probable que el perro ya esté educado y socializado, pues ya ha tenido otros amos antes. Quizás necesites adaptar al animal a un nuevo adiestramiento pero tendrás a un animal disponible a aprender y a adaptarse.
Son tantos los perros que esperan ser adoptados que, por suerte y por desgracia, podemos escoger entre muchos el más afín a nosotros.
Los perros adultos suelen estar acostumbrados a tratar con otros perros y mascotas.
Saben dónde tienen que hacer sus necesidades.
No morderá los objetos y muebles de nuestro hogar.
Generalmente, conoce las órdenes más elementales.
Un perro adulto está ya acostumbrado a tratar con humanos.
Se adaptará rápido a nosotros y a su nueva vida
El cariño y agradecimiento que nos devuelve el perro adulto es muy intenso y consciente
Si bien no habremos conocido a nuestro animal siendo un cachorro y la ternura y gracia de esa época, nos evitaremos todos los inconvenientes de esta etapa.
Te prestará más atención y estará más alerta a tus órdenes y necesidades que si lo adoptas desde cachorro.