Estuve tres años viviendo en Soria.
Es un sitio muy tranquilo, pero tiene todo lo necesario de una ciudad (supermercados, transporte público, hospital, parques, etc.). Incluso su pequeño centro comercial en Camaretas (algo vacío, pero sin pretensión de llegar a más). Y un Leclerc en el polígono industrial que es un hipermercado con bastantes cosas.
Hace un frío que pela y sopla el Cierzo, pero viene a dar igual.
Se puede sociabilizar perfectamente. Es decir, la gente siempre tiene algo que hacer y suele haber eventos, celebraciones. En San Juan es el auténtico despiporre.
También está muy lejos de otras capitales. Comunicada con Madrid por autovía y tren (este último que no recomiendo porque es un tostón de viaje).
Tenía mis recelos, pero conservo muy buenos recuerdos de la ciudad, de sus alrededores (especialmente San Saturio, Santa Ana, Monte de las Ánimas); del Urbión, Cuerda del Pozo, Los Rábanos, y pueblos con muchísimo encanto de la provincia como Vinuesa, Burgo de Osma...
Una maravilla de lugar.