pisitófilos creditófagos dijo...
En materia de hamburguesas, mejor que Alfredo's Barbacoa es el Knight n'Squire, también en la misma zona.
En cuanto al tema que os ocupa, NO PUEDE HABER YANOSESTAMOSRECUPERANDISMO SIN PREVIA CAPITULACIÓN.
Hay que enterrar al muerto. Y, en materia de burbujas, pirámides y ferias, ¿cómo se entierra al muerto?
Tiene que recorrerse la totalidad del camino a la baja en materia de precios inmobiliarios. Entonces, una vez que estemos allí abajo:
- las expectativas ya no serán bajistas, y
- los indicadores se estabilizarán.
Los rocamboles están encantados de la vida con SALIDAS EN FALSO. Aprovechan para soltar maulas todavía muy por encima de su verdadero valor.
¿Por qué la diferencia entre valoraciones y precios de mercado sigue siendo tan grande?
Todavía no es mínima esa diferencia (y estamos muy lejos de que lo sea) porque el timo inmobiliario no está consumado, toda vez que los niños compraron sus pisitos sobrevaloradísimos con D.O.P. (dinero de otras de personas). ¡Son los prestamistas los que están viendo el problema que se les viene encima!. Es en este sentido en el que podemos calificar la crisis inmo-hipotecaria que padecemos como "financiera". El timo se consuma casi por tracto sucesivo, conforme los niños van devolviendo el dineral que les hemos prestado, a lo largo de las próximas dos décadas y media.
Se define, así, un próximo futuro ambiguo.
¿Quiere esto decir que no va a haber capitulación o rendición sino hasta que el último de los niños cancele su hipotecón?
No.
Tiene necesariamente que haber capitulación (y, probablemente, a final de este mismo año) porque tenemos que seguir viviendo. Tiene que haber actividad económica y, sin actividad crediticia, es imposible que la haya. También, la actividad económica nueva tiene que ser sanadora; pero, desde luego, tiene que impedirse que el junkie vuelva a meterse en vena "loh miyoneh" para jugar al juego de suma cero usurero de El Pisito.
Ahí está la ambigüedad calculada en la que se entra La Comedia de Gallinas en la que nos han metido los rocamboles de El Pisito y su versión política El Terruñito.
Vamos a estar una parte de la sociedad viviendo en el futuro, libres de hipotecón, centrados en las actividades exportadoras y llenos de ilusión, como corresponde siempre que comienza una nueva era; y por contra, va a haber otra parte de la sociedad apegada a El Pisito & El Terruñito, llamándonos, ¿cómo dice el optimista papanatas de más arriba?, "agoreros"... sólo porque su hez de pisito no vale nada, lo que es estrictamente verdad (perdónenme por el vocabulario, pero reconozcan conmigo que siempre, tras todas las estafas, aparece estos amargados que se niegan a reconocer su pérdida).
Se define, pues, una situación ideológica ambigua porque tiene que seguir vivo (en las atribuladas mentes de algunos) el nuncabajismo inmobiliario (bajar nunca baja, alquilar es tirar el dinero, venderse todo se vende, el dinero no renta nada y esta zona va para arriba).
Se define, asimismo, como corresponde con todo proceso tan devastador como es una burbuja-pirámide-feria inmobiliaria intergeneracional, una transformación de la segmentación social explicativa:
- pasamos de ser una sociedad dividida en triunfadores, pillados y observadores,
- a ser una sociedad dividida en triunfadores-rebajados, inmomutilados e inmoindultados.
Usted, que lee esto, ¿dónde se encuadra?
Finalmente, no arrematan en general contra la banca. La banca sólo puede ser acusada de tres cosas:
- haber financiado a los jugadores del póquer inmobiliario hasta límites insospechables;
- haber dispersado el riesgo crediticio de forma extraordinariamente eficaz; y
- haber levantado el negociete usurero a tiempo, toda vez que no va a haber ninguna revolución.
Arremetan contra la banca juguetona, entre la que se halla la politizada, encima, con políticos de segunda división, regionales.
¡Que su venganza de inmomutilados no les convierta en anti-sistema!.
Vuelvan a las cosas buenas de la vida, especialmente, las espirituales, porque el dinero no lo es todo en la vida. Unas veces se gana y otras se pierde. Además, al fin y al cabo, cuando devuelvan el capital que les hemos prestado, ustedes tendrán algo suyo. Y, ¿quién sabe?, quizá sus herederos puedan beneficiarse de la vuelta de otros días de Sodoma, cuando se pierda la memoria de los que acabamos de vivir tan cobardicamente complacidos.
Gracias por leerme.
14:46 16-01-2010