¿De qué crees que trata la grabación?, ¿de ellos hablando de parchís o de fútbol?
Ni idea, no sé nada de la grabación.
Lo que digo es que no tiene sentido alguno que un chantajista que trata de presionar a alguien con hacer público algo, divulgue públicamente los detalles de la negociación o la existencia de esa prueba en la que se basa en chantaje.
Suponga que un vecino cotilla se ha enterado que un tío se acuesta con una compañera de la oficina.
- O me das 10.000 euros o voy a contarle a tu mujer que le pones los cuernos con la de la oficina.
Bien, esto es una oferta de venta: el donjuan descubierto puede comprar por 10.000 euros el que su mujer no se entere. El coste de esa compra son 10.000 euros, la mercancía que se compra es la garantía de que su mujer no se entere.
Veamos ahora a un chantajista más torpe.
- O me das 10.000 euros o voy a contarle a tu mujer que le pones los cuernos con la de la oficina y para que veas que hablo en serio, ayer estuve con tu mujer y le conté lo tuyo con la de la oficina.
¿Ve cuál es el problema en esta transacción comercial más diseñada o poco meditada? Si su mujer ya lo sabe, ¿Qué compra el donjuan cuando paga los 10.000 euros? El chantajista, que lo que vende es la garantía de que la mujer no se enterará, está destruyendo el valor de la mercancía si él mismo hace que la mujer se entere.
En el caso Barcenas que se describe en este post, el chantajista sería un chapucero a medias.
- O me das 10.000 euros o voy a contarle a tu mujer que le pones los cuernos con la de la oficina y para que veas que hablo en serio, ayer estuve con tu mujer y le insinué claramente lo tuyo con la de la oficina y va a matarte en cuando te vea.
En este caso, el chantajista, sin destruir completamente el valor de la mercancía, la deteriora sin necesidad alguna. En donjuan ya no puede comprar por 10.000 euros el billete para irse de rositas y va a caerle encima, sí o sí, el 70% de la mala os*tia de su mujer
Así que la mercancía se ha depreciado en un 70% sin ninguna necesidad y el precio justo de la transacción serán 3.000 euros y no los 10.00o que habría sacado si hubiera diseñado mejor la estrategia comercial.
Y es que el chantaje es uno de esos "lost arts", las cosas en este campo se hacen hoy en día a batalla, sin el mimo, cariño y cuidado de los detalles que requieren.
Esperemos que Tsiripas y su equipo de prometedores chantajistas se esperen un poco y recuperen la anterior grandeza de este noble arte.