Una vez me dio la fruta locura de bañarme en agua helada en el pirineo en primavera, helada con hielo...
Me metí hasta las rodillas, la típica sensación de cuchillos atravesándote, dolor leve moderado; me salí y a los dos tres minutos para dentro otra vez, no sin respeto
La sensación fue muy fuerte de frío pero no era dolorosa, era mas bien pavor y la necesidad de gritar y moverte rápido, como no era muy grande el sitio.. Pues a los 3 minutos para afuera
La verdad que muy reconfortante y oy repetiria sin dudar