Yo creo que después del verano, cuando se asuma el parón turístico, los pisos de veraneo y segundas residencias empezarán a bajar. Después la bajada se irá extendiendo al resto de viviendas, pero no todas por igual. Algunas apenas bajarán y otras no las querrá nadie.
Pero las condiciones para conseguir una hipoteca serán más duras. El que tenga cash sano encontrará buenos precios.
Estamos en fase de miedo. La fase de pánico vendrá después, y la caída se acelerará.
No deseo el mal a nadie, es lo que creo que va a ocurrir, todos vamos a sufrir, y puede que el precio de la vivienda sea la última de nuestras preocupaciones.
Mucha suerte ahí fuera.