Hay un plan, y unos objetivos que desconocemos.
La reacción indepe es absurda: los golpistas quedarán en la calle desde el minuto uno. Deberían haber estado celebrándolo, y sin embargo lanzaron a los simples útiles de siempre a la calle.
La reacción, o no-reacción de Sánchez, también sigue una estrategia, y unas órdenes. La PSOE siempre ha seguido órdenes del extranjero.
Lo que no podemos saber son los objetivos inmediatos. Y aún menos, si este episodio forma parte de un plan mayor, y cual es ese plan.