Si el menos uno de cada cinco españoles ahorrara en oro habitualmente, el Estado podría plantearse entrar en estos berenjenales. Pero aquí una inmensa mayoría cobra en euros y no corre a cambiar los papelitos por dinero de verdad.
De momento con lo que recaudan de IVA y seguridad social, regalar las islas a extranjeros y quedarse con alguna que otra empresa quebrada para colocar amiguetes ya les vale.
¿Qué consecuencias hay para los políticos que gestionan la crisis económica? Las mismas que las consecuencias de los que han gestionado mal la crisis sanitaria, ninguna. Ellos van a lo suyo, enriquecerse mientras pagamos otros.