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Hay una base catalana en la cara oculta de la Luna desde los años 50. Los chinos lo fliparon cuando llegaron allí con la Chang'e-4.
Se encontraron una base espacial habitada por el CIC (Comando Intergaláctico Catalán). Tenían allí tropas, miles de soldados, fábricas de butifarras, cultivos de Calçots y esteladas por todas partes.
Por supuesto llegaron allí con naves espaciales de ingeniería 100% catalana. Menudos son ellos.
Y el fuego, tío, lo descubrió un catalán. Se fue nervioso a su cueva cuando supo que los neandertales de Madrid no le concedían a su tribu la independencia y se puso a frotar dos palos frenéticamente para calmarse y PUM: fuego.
Debe haber algún registro rupestre por ahí. Desde entonces han evolucionado por encima de todos los pueblos.
Por eso la bandera de ellos tiene el tonalidad amarillo, ¿no me digas que no lo sabias?