Nononono.
He dejado claro que lo relevante para el sistema endocrino son LAS SEÑALES HORMONALES.
Una insulinhemia elevada señaliza al cuerpo que ES HORA DE ACUMULAR GRASA.
Si hay suficiente glucosa disponible, el cuerpo mantiene el ritmo basal. En cambio, si te dedicas a hacer una dieta deficitaria (ya por comer menos, ya por moverte más), como las señales hormonales indican que hay que AHORRAR GRASA, el cuerpo ajusta el ritmo basal a la ingesta.
En cambio, una insulinhemia reducida señaliza al cuerpo que ES HORA DE USAR LA GRASA ACUMULADA, y como quiera que hay de grasa de sobra (en general) para mantener el ritmo basal, éste no se ve perjudicado.
De hecho, debido a que el ayuno desencadena no solo una caida de la insulina, sino también secreción de adrenalina, hormona del crecimiento y cortisol (para proteger el aparato musculoesquelético y optimizar su rendimiento de cara a encontrar alimento), de hecho el ritmo basal AUMENTA durante los primeros días de ayuno; no es hasta el quinto o sexto día que el cuerpo asume que el alimento va a tardar en aparecer, y que hay que bajar el ritmo por si acaso.
Pero de primeras, en cuanto la insulina en sangre baja, empezamos a quemar grasa como si no fuera a acabarse nunca.