Lo gracioso es que el plan ruso era invadir Ucrania para que el mundo quedase aterrado cuando viesen en directo lo que logran sus misiles, sus hackers, sus aviones, sus fuerzas especiales, los fabulosos avances de su ejército regular... Kiev caería en una mañana y luego negociarían (o sea: impondrían) a occidente lo que sea que les diese la gana.
Lo que se vio en directo es que sus misiles no lograron nada, sus aviones y helicópteros solo pudieron volar las primeras horas y por la sorpresa, la crema de sus fuerzas especiales fueron aniquilados en un instante, sus columnas estaban empantanadas y eran aniquiladas cuando intentaban avanzar...
Se vieron atrapados en algo que nunca quisieron: una guerra larga.
Han hecho lo que han podido y han dado algún susto. Pero no lo suficiente y no lo bastante rápido. La ventana de oportunidad en que podrían darle la vuelta a la situación se les cierra ya sin que puedan lograrlo.
Al final la desmilitarizada es Rusia.