Hombres de poca fe.
Es posible que la plata haya perdido parte de su potencial monetario, pero esto ya sucedió en el S. XIX y la plata no ha dejado en este tiempo de perseguir al oro, con cierto retraso, pero la plata sigue conservando una ratio aceptable que varía de 1;100 a 1:30 en los últimos 15 años. Volveremos a ver esta ratio y quizás sea el momento de soltarla por oro. El carácter industrial de la plata será dejado de lado en cuanto su precio supere cierto umbral, y la gente entienda que es un buen medio de reserva de valor.
Pero la cuestión es que cuando ocurra el evento, el cataclismo, y esto es algo que nadie debe dudar que va a ocurrir en los próximos tiempos, porque la deuda, la inflación y los tipos así lo determinan, lo que se va a producir inicialmente es la compra de dólares, ya que los institucionales y la fauna que bala seguirán la liquidez inmediata, pero al poco tiempo los lemmings se darán cuenta de que algo no va bien con el dólar, y se iniciará la estampida hacia el oro, pero como de este hay mucho menos y encima es muy caro para el bolsillo del pobre, se empezará a perseguir la plata como si no hubiera un mañana, lo que elevará su cotización al infinito dado que es un mercado PEQUEÑO.
Da igual que el evento sea deflacionario, que lo dudo porque ante susto o muerte, la FED va a elegir susto, o inflacionario.
La clave sería poder anticipar con semanas cuando va a ocurrir el cisne oscuro, dados los fundamentales actuales, prácticamente cualquier cosa lo puede ser. La grieta que va a hacer estallar el globo puede ser cualquier cosa, desde la quiebra de un pequeño banco, hasta la ampliación inesperada de cualquier conflicto, o una notica pésima sobre inflación. C U A L Q U I E R C O S A.
Sólo se necesita un poco más de pérdida de fe en el valor del dólar y del resto de papelitos, para que el proceso se inicie de la forma imparable en que suelen darse estas cosas.
Después habrá un montón de idiotas que recordarán las cosas que leían en algún que otro foro y se lamentarán por no haber hecho antes los deberes.
