Las balas de goma pueden dar de baja de la suscripción de la vida perfectamente si pegan en la cabeza, nuca o cuello, además de que puede provocar serio riesgo de hemorragia si da en hígado o bazo, asfixia si da en la tráquea, sin contar con otro tipo de lesiones como pérdida de globo ocular, testículos, etc.
Que el tipo caiga al suelo desplomado y no se mueve indica que a tenido que recibir el disparo probablemente en la cabeza.
La última pelota de goma de la Ertzaintza mató a Cabacas: "Era como si nos estuviesen fusilando"