Hace tiempo ya paso algo similar, no se que pasaria con el hombre como los mass hez no quieren hablar de estos temas no dan mucha info.
Mata a tiros a tres personas de etnia gitana, después de una discusión
Amenazaron con hacer daño a su mujer y a su hija de cuatro años.
El jurado popular ha absuelto al empresario
José Antonio Zamora, de 42 años, de los delitos de asesinato de los que fue acusado, después de que en julio de 2011 matara a tiros a tres miembros de una familia de etnia gitana en la barriada de Palomares (Cuevas del Almanzora), al considerar que actuó
en legítima defensa en el caso de las muertes de los dos varones, un padre y su hijo, y por
trastorno mental transitorio en el caso de la mujer, esposa y madre de ellos, respectivamente.
Según han informado a EL MUNDO de Andalucía los abogados de Zamora, Martín de los Reyes Martínez y Ernesto Osuna, el jurado se ha acogido para
emitir su veredicto de no culpabilidad a sus tesis, que alegaban que su defendido actuó en legítima defensa ante los ataques que las víctimas le estaban infligiendo momentos antes de su muerte.
El abogado Martín de los Reyes Martínez explica que José Antonio Zamora disparó a las tres víctimas con una escopeta de tiro olímpico después de haber sido atacado por los dos hombres cuando estaba en el interior de su vehículo. Uno de los atacantes introdujo su cuerpo en el interior de la furgoneta para morder en el rostro al conductor, lo que le provocó
la amputación de la nariz, mientras otro lo sujetaba por el cuello, en un intento de estrangulamiento.
Ante esa situación, en la que Zamora sentía que le estaban empezando a dar de baja de la suscripción de la vida, instintivamente
cogió la escopeta que llevaba en el interior del vehículo y disparó contra los atacantes, resultando fallecidos tres miembros de la misma familia de etnia gitana, Juan Santiago, de 46 años, su hijo Cristóbal, de 25, y segundos después Fermina Santiago, que se acercó al lugar para auxiliarles.
La amputación de la nariz, el fuerte dolor y el miedo a morir fue el que provocó, según la defensa, la enajenación mental transitoria que llevó al empresario a
disparar contra la mujer, una vez que ya había hecho lo propio con su marido y su hijo.
Los abogados del empresario de la construcción, que esperaba ser puesto en libertad la tarde de ayer miércoles, se muestran satisfechos con el veredicto del jurado, que han asumido prácticamente todos sus planteamientos, frente a la petición de la Fiscalía y la acusación particular, que reclamaban 48 años de prisión por tres delitos de asesinato. «El veredicto se ha producido después de que el jurado se haya puesto
en la piel del acusado. Puede tratarse de una resolución sorprendente, porque evidentemente el hecho es muy grave, pero las circunstancias eran también muy especiales por la situación que pasaba el imputado», dice Ernesto Osuna.
Largo enfrentamiento
El acusado explicó al tribunal durante la vista oral del juicio, que se ha celebrado en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Almería, que los ‘enfrentamientos’ con los miembros de la familia gitana se remontaban a 2008, cuando
denunció el robo de material de construcción por valor de unos 18.000 euros en una obra suya. Las disputas fueron a más hasta que cuatro días antes del crimen varios miembros de la familia
le propinaron una brutal paliza en una gasolinera de Cuevas del Almanzora.
Como consecuencia de esa agresión, Zamora presentó denuncia ante la Guardia Civil y otro integrante de esa familia, Cristóbal Santiago, que posteriormente resultó fallecido en los hechos, se introdujo en el domicilio de la familia del acusado para
conseguir que retirara la denuncia, amenazando con volver con más gente si no lo hacía y advirtiendo que sabían por dónde se movían la mujer y la hija de cuatro años de edad de Zamora.
Según el testimonio de José Antonio Zamora, bajo la presión de las amenazas proferidas contra él, su familia y su patrimonio, decidió subir al poblado donde residía la familia gitana para pedirles que no volvieran a amenazarlo, cuando
al abrir la ventanilla de su vehículo para hablar, recibió el mordisco en su nariz, lo que desencadenó el fatal desenlace.
Tras el veredicto de no culpabilidad, se espera que en breve el Juzgado emita su sentencia, en la que Zamora será declarado culpable por posesión ilícita de armas. La acusación particular, representada por el abogado José Luis Alabarce, ya ha anunciado, no obstante, que presentará
un recurso ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía.
Un jurado absuelve a un empresario que mató a tres miembros de una familia