No hay que buscar explicaciones. El ascensor ya se ha roto. El mercado de la vivienda ya se ha roto. Por mucho que se quiera volver, no se van a generar perfiles solventes. Al clero funcionarial como único comprador solvente (hablo generalizando, hay funcis que no pueden comprar porque han llegado tarde a la fiesta y son grupos C2, y hay perfiles técnicos que sí ganan dinero para aplicarse el tocatejismo, pero la vivienda es un bien básico para todos y el mercado está roto para más del cincuenta por ciento) hay que sumar que una gran parte de los perfiles solventes que se están generando van a heredar almenos una vivienda. Por lo tanto, eso de comprar un casoplon a precios burbujeados teniendo ya vivienda, como que no; por eso se oye mucho eso de "me quedo en líquido". De hecho, yo ya tengo amigos que están heredando pisitos, y aunque pueden, se niegan a comprar pisito.
Si nos ponemos a mirar la diferencia entre los pisos en venta y en alquiler, los que están en venta suben y los que se ponen para alquilar, bajan. Piden perfiles totalmente irreales, el mercado se paró abruptamente hace meses por la avaricia; hay pisos Paco de hez invendibles que no los quieren poner para alquilar porque cuatrocientos euritos al mes, al rentista ensoñador, les saben a muy poco. No entienden o no quieren entender que es eso o la nada. Y cuanto más tiempo pase, más se están deteriorando esos perfiles puesto que sus condiciones, al ser casapapis o negarse a trabajar para no tener vida, van para abajo.
Si el sistema no es capaz de ofrecer trabajo a tiempo completo con estabilidad para que se pueda reactivar la vivienda, este subidón que hemos tenido estos años no han sido más que algunos perfiles solventes, muchos ahorradores que no sabían donde meter su dinero (y esto ya se ha acabado) y grandes especuladores, se han puesto a comprar vivienda y han dado aire a un mercado que quiere ser burbuja y no llega a globo de atracción de Feria. Por eso, se pinchará sin problemas porque a la banca no le ha afectado, solamente hay perfiles solventes atrapados hasta la jubilación en lo que ellos han deseado y ahorristas que han comprado unas preferentes en las que pueden vivir, dormir e incluso pintarlas del color que más les guste. A estos últimos, ninguna pena. Cuando se juega a especular con algo tan básico como la vivienda y que tanto destrozo ha hecho a las generaciones más jóvenes, ninguna pena cuando pierdan lo invertido porque nadie pagará lo que ellos quieren, ni en compra-venta ni en arrendamiento.
Por todo esto, los grandes capitalistas, los de verdad, o rapidamente reactivan el mercado de vivienda hundiendo los precios (y es lo que van a hacer) o se ponen a crear puestos de trabajo bien remunerados como locos (como hicieron en 2005-2007, y eso ya es imposible). Han mantenido la fiesta y el endeudamiento de la sobrepreciación de la vivienda endeudando ad eternum las cuentas públicas, pero eso solamente está creando un mercado roto, malestar social y que la economía pueda hundirse aún más rápido que en 2008-2012, y esto último solamente aceleraría el deterioro de unas cuentas públicas quebradas y una sociedad rota y descontenta, algo que no interesa cuando nuestro principal modelo productivo es el turismo. No les va a quedar otra que intervenir, digan lo que digan en campaña electoral, les guste más o les guste menos. La economía se va a derrumbar si el ladrillo sigue inaccesible, y a muchos esto no les va a gustar. Tirarán de decretos antes de primavera, no les quedará otra.