Hola compañeros, hoy vengo a hablaros de la estulta histeria colectiva que se desata cuando llega la primera boda o el primer hijo en un grupo de amigos. Las siguientes veces, estos sucesos también desembocan en una espiral de mareantes grupos de whatsapp con miles de mensajes, propuestas más rancias que un pedo de momia para hacer "algo especial", conspiraciones ocultas entre subgrupos, en fin, comidillas intrascendentes con las que te abrasan la oreja durante meses.
LA BODA
Hace unos 3 años llegó la primera boda. La parejita de las narices (dicho con cariño) se fue a casar en la ciudad donde se conocieron de erasmus, lo cual convirtió la propia asistencia en algo bastante costoso. Y aunque con la boca pequeña lo reconocieron y dijeron que ya era bastante regalo acudir, vimos lógico tener un detalle con ellos. Al final, a última hora, acabamos pillando una tarjeta de esas con un paquete de finde vacacional :
: , original de narices, vamos. Pero bueno, es un regalo decente si tenemos en cuenta que somos cuatro gatos y que de aquellas la mitad estábamos más tiesos que Carpanta.
Un año antes de la boda, algún lumbrera creó el grupo de whatsapp de la boda. Un puñetero año antes. En dos días ya estaban organizando una despedida con medio año de antelación, con su propio grupo. Decenas de mensajes todos los puñeteros días, la gente viniéndose arriba, quedabas a tomar una caña y la mitad de la conversación iba sobre la despedida...Al final fueron 3 días a todo copete en una casa rural y todos los lugares donde se pudiera gastar pasta en 50 km a la redonda. Un evento al que un servidor pasó de acudir. De hecho me salí del grupo, creo que a tiempo.
Una jodida histeria colectiva, vamos. Seguimos igual con el viaje, después con el regalo de boda, las fotos...Y todo el rato con la chorrada de que "es el primero que se casa, tiene que ser inolvidable". Pero la mayor tontuna vino con el puñetero flashmob. Resulta que a uno se le ocurrió la brillante idea y a todo el mundo le pareció la bomba. En décimas de segundo, se pusieron a organizar ensayos, grabaciones y toda la pesca. Por suerte aquello me pillaba fuera de España por trabajo y tuve la excusa perfecta para no dañar sus sentimientos. Pero vamos, que la dieron pardísima para hacer una gilipollada de 2 minutos que daba más grima que ir al dentista. Si aquella aberración llega a acabar en Youtube, me habría tocado cambiar de amigos.
Ingenuo de mí, pensé que aquella experiencia nos había servido para madurar. Otras dos bodas en estos tres años me dieron buenas vibras: la gente no estaba tan obsesionada con la preparación, todo fue mucho más ágil y discreto. La gente ya ha asumido mi decisión de no acudir a despedidas de soltero, y no me dan la barrila. Qué paz. Hasta que la parejita de marras ha recibido la feliz noticia de su próxima paternidad...
EL PRIMER BEBÉ
Hace apenas una semana se hizo oficial: a finales de febrero de 2019 llegaría el primer bebé del grupo de amigos, del más antiguo de los que tengo. Falta la friolera de medio año, medio puñetero año. Y llevamos desde el día siguiente en un infierno de nuevo grupo de whatsapp del cual ya estoy hasta las pelotas. ¿El gran factor de la vuelta a la degeneración? Las jodidas novias de mis hamijos y un par de petardas que hay en el grupo.
A ver, que a mí hacerles un regalo entre todos me parece estupendo, es la mejor manera de regalar algo presentable y útil, y entiendo que se trata de un protocolo social legítimo. Más si tenemos en cuenta que la pareja no pasa económicamente por su mejor momento, y que tiene pinta de que se han puesto a ello porque la chavala se acerca a una edad peligrosilla para parir. Está bien apoyarles.
Lo que no me parece de recibo es empezar con estas cosas cuando quedan 2/3 del embarazo, 6 meses, unos 180 días. Que bueno, podría ser una cosa sencilla de cagaprisas, pero ya hay 2 o 3 insinuando que hay prisa, que tenemos que adelantarnos para ser los más originales, los que antes hagan el regalo. Y eso es menso e infantil, además de obsceno. Dios no lo quiera, pero pueden pasar muchas cosas malas en estos 6 meses, hacer un regalo de bebé con 4 o 5 meses de antelación es una simple muestra de oligofrenia, pero si le pasa algo malo al feto, se convierte en una broma macabra. Y bueno, en general, ¿qué cachopo más da si eres el primero o no?
Pero bueno, más allá de los plazos...La gente está de la fruta olla.
-Una dice que a su hermana le hicieron una tarta de pañales y a todo el mundo le parece supergracioso y original...jorobar, pero si tengo un primo que nació en 1993 y recuerdo perfectamente que a sus padres les regalaron lo mismo. Hablamos de algo similar a este horror:
-El otro dice que no puede ser lo de dar dinero o una tarjeta regalo, que queda muy feo y muy frío y que a él no le gustaría. Claro cabrón, tus padres y los de tu novia tienen pasta para aburrir...Pero es que este chaval es un pringadete laboral y su mujer parecido.
-La otra dice que lo de dar regalos no puede ser porque no sabemos qué es lo que quieren, necesitan o les va a regalar otra gente, y que tampoco podemos preguntárselo directamente.
-El otro dice que ya le ha pedido cotización a su cuñao que trabaja en El Corte Inglés de un cacharro de los que habíamos dicho.
-Otro que dice que deberíamos hacer lo de la tarta de pañales, pero metiendo billetes pequeños entre medias, y aparte hacerles el regalo que el otro ha mandado cotizar sin que nadie se lo pidiese.
-El otro que se descuelga con un "qué menos que poner 300 pavos cada uno". Que hoyga, yo los tengo y los pondría con gusto si todos estuviéramos en situaciones similares, pero pimpollo, no humilles a la peña que anda jodida de pasta. Por suerte ha salido un chaval y le ha dicho que no se flipe tanto, pero vamos, que encima le llamarán rata.
Total, la peña luciéndose de narices: unos luciendo billetes, otros luciendo un concepto de amistad extremadamente afeminado, otros luciéndose como organizadores de eventos...jorobar, qué hartura. Yo básicamente no me salgo del grupo por cortesía, pero lo ignoro. Ya dije lo que tenía que decir: que era demasiado pronto, que prefiero poner pasta para algún vale o similar y que no tengo tiempo para hacer tartas de pañales ni esas hezs. He insistido especialmente en lo de esperar a que el niño nazca, aunque tengamos la decisión y recaudada la pasta con algún que otro mes de antelación. A mi persona de más confianza en el grupo ya le he comentado que no me mareen, que cuando tengan claras 2 opciones me pregunten y ya.
A mí también me hace ilusión que se casen o tengan hijos los colegas, hermanos, primos, etc. Pero de verdad, ¿hace falta volverse tan jodidamente loco, estar meses agobiado, darle ocho millones de vueltas a cualquier nimiedad como un dolido obseso?