Por mi parte, de acuerdo.
Mismos requisitos para tener un perro de esos que para tener un arma. Si el perro hace algo a alguién, el propietario paga todos los gastos y una generosa indemnización al agredido, y si es insolvente, picando piedra hasta que resarza todos los males causados por el perro.
Los centros de recuperación de perros, los pagan los propietarios de perros peligrosos, y una vez "reeducados" se informa a una lista de voluntarios de quien se quiere hacer cargo del perro, (incluidos simpatizantes de Pacma), informando porqué el perro ha acabado reeducandose.
Si en un plazo razonable nadie lo adopta se le sacrifica.
¿Estarán de acuerdo?