No saben lo que se pierden aquellos que, fruto de la casualidad, han nacido y/o viven de forma permanente en las zonas tropicales y ecuatoriales.Más allá de las estaciones concretas, lo bueno es la variabilidad, me parecería espantoso que sólo hubiera una estación.
esas hojas muertas son la vida de la primavera por venir.Una vez perdida la fascinación de vivir un cambio de estación, pasar frío, que hablaras y te saliera vaho visible, ver setas, mirar a las ardillas afanadas recogiendo comida...la gente como yo nacidas y crecidas bajo el solazo implacable, no podemos con esta estación.
Vale, me quedo con el frío en la cara y el calor en la mano, de otra mano, mientras paseas moviendo hojas muertas.
A mí me encanta el otoño, pero las fotos sobrefiltradas me dan repelús.Y empieza hoy (oficialmente) por fin algo que me gusta. Dos mesecitos de placer por delante hasta que nos asedien con las pilinguis Navidades.
Que ustedes lo vendimien bien.