Yo no he comparado la adicción al tabaquismo con la adicción a posturas contrarias a las banderillas y medicina occidental en general. Me limité a señalar que el tipo de respuesta que suelen dar quienes, pudiendo elegir un camino, eligen otro alegando que eligieron porque les salía de los cojoneh, es bastante similar. Mejor dicho idéntico. Nadie los coaccionó pa fumar ni rechazar la banderilla. Fue su decisión personal. Es lo que hay. Cada uno toma sus propias decisiones en la vida, y están los que se ponen a llorar, diciendo que no volverán a probar una copa en su vida, cuando se les anuncia que solo queda la opción del trasplante hepático, o quiénes como en el caso de mi familiar o el coronabichado este, dicen que, aunque volvieran a entrar 100 veces en la UCI, 100 veces que seguirán fumando o rechazando la banderilla.
Ojalá le sirva esto pa entender que el destino, muchas veces depende de uno, y que se puede vivir bien, sin jugársela tan alegremente y, si la cosa ha salido mal, tener las agallas de ese coronabichado o mi familiar que, ya le digo, no dejó de fumar ni a horas prácticamente de sedarlo.