Tu opinon como la de todos simpre interesa.
¿Tú crees? Puede que a ti si, que tiendes a ser educado y sabes escribir en español... En general, diría que no.
De hecho, la sensación que me da es que entre lo que es mi opinión y lo que los analfaburros cacaculo creen que es mi opinión suele haber diferencias insalvables. Es normal. La gente que no sabe escribir normalmente tampoco sabe leer, así que entienden un poco lo que más les apetece.
Reconozco que no he estudiado el nuevo mapa a fondo y no sé hasta qué punto se han tomado licencias a la hora de repartir el oro y el coil. Pienso que es, aún, todo profundamente especulativo. A lo mejor esos sitios como Berlín en los que decís que han puesto oro sólo generan un 0,00001% de oro. Yo tengo un par de parcelillas pequeñas en Berlín y no me ha tocado nada. Lo mismo en Tokio.
El resto de mis propiedades no lo he comprobado, porque paso de estar con el mapa arriba y abajo; ya lo sabré cuando se puedan leer los recursos en el portfolio de forma cómoda.
A mí me da igual lo que me toque, la verdad. Que repartan todos los recursos como quieran. Mi deseo es que, una vez hecha la repartición, y las posibles correcciones que se hagan, la dejen y se empiece a poder hacer algo con todo eso.
Mi ansia no es que me regalen esto, lo otro, o lo de más allá. No estoy en este mundo para ser un puñetero regalao.
Lo que yo quiero es JUGAR. Lo que quiero es que, me toque lo que me toque, poder jugar al Risk/Monopoly con ello de la manera más inteligente que se me ocurra. Lo que deseo es que terminen de repartir, como les salga de las narices, y que empiece el juego.
Lo que quiero es estudiar la mejor localización de mis fábricas, la mejor localización de mis almacenes, hacer el diseño más óptimo de mis droides, desarrollar la mejor política/estrategia económico/industrial/logística que sea capaz de desarrollar.
No me importa empezar con 1 o con 10... No me importan las cartas que me toquen. Lo que quiero es jugar mis cartas lo mejor posible y eso, todavía no se puede...
A ver, por supuesto que prefiero que me toque 10 a que me toque 1... pero no me obsesiono con eso. Con eso se obsesiona aquel que considera que el mundo le debe algo. El que sabe jugar, sabe jugar. El que no, ese necesita cartas buenas o pierde. A veces incluso pierde teniendo las cartas buenas, por no saber jugar.
A mí el mundo no me debe nada. Ni el mundo 1, ni el mundo 2. No quiero existir como un regalado. No podría mirarme al espejo siendo un regalado.
