La versión que ofrecen los policías es patética, pero no hace falta ni discutirla. Ya se encarga de tumbarla la actuación de los de uniforme que acuden al fregado con su propia actitud, que básicamente consiste en:
- Allí no se detiene a nadie aunque haya habido una grave agresión.
- Al policía se le tolera la chulería y el vacile sin decir ni mú.
- Al cuñado del alopécico incluso le dicen que se pire, y que denuncie dónde quiera, que a ellos les da igual el tema.
- El policía se va con ellos en plan colegueo, no detenido.
No es que no sepan de que va el asunto, que simples tampoco son, es que SABEN PERFECTAMENTE lo que ha pasado y no merece la pena perder el tiempo. Pero no contaban, evidentemente, con que los vídeos se iban a viralizar muy rápido y los telediarios le iban a dar caña al tema, que es el motivo por el que al día siguiente ya no es que se los detenga, es que se decreta su ingreso en prisión directamente.