¿Son imposibles las sociedades agrícolas autosuficientes?

No es sólo divertido.
Permite recuperar la sensación de estar completo y formar parte de un todo relacionado. Sensación cuya carencia es el principal motivo del desequilibrio existencial que afecta a gran parte de la población. Miren el progresivo incremento del consumo de ansiolíticos, tranquilizantes por poner sólo un ejemplo.
Deberíamos intentar ser autosuficientes por pura higiene espiritual.

Seguramente tendremos que serlo pero por simple necesidad, la mejor universidad y además gratuita.
 
Eso no es comunismo, es lo mas parecido al carlismo que hay.

Una huerta con gallinas y conejos no sólo da para vivir sino que literalmente no te lo puedes acabar.
La tierra es extremadamente generosa siempre y cuando tengas agua,
Los intercambios nacen de manera espontánea entre hortelanos. No hace falta crear ninguna comunidad porque "ya son una comunidad".
No podrás cultivar de todo ni falta que te hace.
Obviamente si te gusta el café lo iras a comprar.
O el azúcar. Bueno, ahora que lo pienso se puede hacer con remolacha azucarera que es un cultivo exento de plagas en principio.
Algún día lo probaré.

---------- Post added 17-jul-2013 at 16:36 ----------

Seguramente tendremos que serlo pero por simple necesidad, la mejor universidad y además gratuita.

Es posible...
Te recomiendo que vayas buscando un huerto con agua si estás interesado en el tema. No creo que haya mejor inversión.
 
Creo que no está de más recordar aquí el Crash Course de Chris Martenson.

El Crash Course Capítulo 1: Tres creencias | Peak Prosperity

El Crash Course Capítulo 2: La sigla "EEMA" | Peak Prosperity

El Crash Course Capítulo 3: Crecimiento exponencial | Peak Prosperity

El Crash Course Capítulo 4: El problema es la función exponencial | Peak Prosperity

El Crash Course Capítulo 5: Crecimiento frente a prosperidad | Peak Prosperity

El Crash Course Capítulo 6: ¿Qué es el dinero? | Peak Prosperity

El Crash Course Capítulo 7: Cómo se crea el dinero | Peak Prosperity

El Crash Course Capítulo 8: La Reserva Federal | Peak Prosperity

El Crash Course Capítulo 9: Brevísima historia del dinero usamericano | Peak Prosperity

El Crash Course Capítulo 10: La inflación | Peak Prosperity

El Crash Course Capítulo 11: ¿Cuánto es un billón? | Peak Prosperity

El Crash Course Capítulo 12: La deuda | Peak Prosperity

El Crash Course Capítulo 13: La incapacidad nacional para el ahorro | Peak Prosperity

El Crash Course Capítulo 14: Activos y Demografía | Peak Prosperity

El Crash Course Capítulo 15: Burbujas | Peak Prosperity

El Crash Course Capítulo 16: Las cuentas no cuadran | Peak Prosperity

El Crash Course Capítulo 17a: El pico del petróleo | Peak Prosperity

El Crash Course Capítulo 17b: Economía de la energía | Peak Prosperity

El Crash Course Capítulo 17c: Energía y Economía | Peak Prosperity

El Crash Course Capítulo 18: El medio ambiente | Peak Prosperity

El Crash Course Capítulo 19: El incierto futuro | Peak Prosperity

El Crash Course Capítulo 20: ¿Qué debo hacer? | Peak Prosperity


Saludos cordiales.

Libertad y buena suerte.
 
me he visto todos los videos, aunque dice verdades, el hecho de como lo presenta y sobre todo que en el ultimo video se queda a medias de la explicación huele a nuevo gurú.

de todas formas, la información que ofrece merece la pena el tiempo invertido en mi opinión.

salud.
 
Ejemplos de autogestión.


Por EFE:

"La conquête du pain" es un comercio de barrio a las afueras de París donde nueve personas se dedican a elaborar baguettes, cruasanes y bollos de chocolate, un establecimiento de esquina no muy diferente, a priori, de las otras 35.000 panaderías esparcidas por el territorio galo.

Sin embargo, es la única "boulangerie" anarquista del área de la capital de Francia, país donde el pan, el queso y el vino, forman parte del imaginario colectivo con el que se identifica la nación de la Torre Eiffel.

"Somos una panadería autogestionada. Aquí no hay jefes, funcionamos de manera colegiada y celebramos una asamblea cada dos semanas donde decidimos lo que vamos a hacer. Todos tenemos el mismo salario de 1.350 euros al mes y el mismo reparto de beneficios", explica a Efe Pierre Pawin, impulsor de esta peculiar cooperativa.

"La conquête du pain" nació hace tres años en Montreuil, antiguo feudo del Partido Comunista aledaño a París, gobernado hoy por los ecologistas. Varios militantes anarquistas decidieron pasar de la teoría a la práctica y ensayar con un negocio autogestionado.

Como nombre para su tienda eligieron "La conquête du pain" (La conquista del pan), un guiño a la homónima obra del anarco-comunista del siglo XIX Piotr Kropotkine. Y como logotipo, una silueta extraída de "La libertad guiando al pueblo", de Delacroix, en la que el personaje del lienzo cambia las pistolas por una barra de harina y cereal.

"Yo era informático y no tenía ninguna formación como panadero. Un día Pierre me llamó y me dijo: llevas diez años hablándome de alternativas. Voy a montar una panadería, ven a trabajar con nosotros", comenta Thomas, que dejó su empleo en una escuela de negocios para lanzarse a amasar "baguettes".

Tres años después, la panadería se demuestra rentable, transforma dos toneladas de harina a la semana y emplea a siete personas y dos aprendices. Thomas no se arrepiente por haberse sumado a esta iniciativa que toma el relevo de "La Fraternelle", panadería autogestionada que nació a principios del siglo XX y desapareció noventa años después.

"Aquí me siento mucho mejor. Sé por qué hago las cosas, aunque físicamente sea mucho, muchísimo más duro", confiesa mientras enseña a un estudiante a preparar una crema de chocolate.

Hornean su propios productos, hasta 35 referencias artesanales que dan prioridad a los productos biológicos, e identifican sus bocadillos y menús con nombres de revolucionarios históricos: "El Bakunin", con atún y cebolleta; "El Durruti", con pollo, queso y curry; "El Marx", con jamón cocido y queso emmental...

Además, si el cliente declara que atraviesa dificultades económicas, tiene derecho automático a un "precio de crisis".

"Basta con pedir una tarjeta en la panadería que da acceso a una reducción. En los productos de primera necesidad, la reducción es del veinticinco por ciento. En el resto, del diez por ciento. La 'baguette' cuesta un euro y con al reducción se queda en 75 céntimos", resume Pierre (1,3 y 1 dólar).

"La gente sabe que es una panadería anarquista, pero vienen porque el pan es bueno y somos agradables", sentencia Pierre.

Por ahora, estos empresarios ácratas no reparten dividendos y dedican los beneficios a devolver los préstamos, a aligerar la jornada laboral y a financiar nuevas contrataciones.

Lejos de ideales utópicos a gran escala, aspiran a que su negocio se mantenga bajo esa fórmula solidaria de repartición de la riqueza y a poder seguir creando empleos.



Panadería solidaria en Paris | El Espectador
 
Última edición:
Parte de guerra.


Ya vamos para casi un año en este país. La verdad, considero sorprendente la actitud de los españoles. Con un gobierno claramente corrupto en otros países del entorno mucha gente habría dimitido ya. Aquí parece que eso no es una opción.

Cada cual sigue con su vida, cada vez más precaria en muchos casos, cada vez más voyante en algunos otros. Pero todo el mundo sigue como si no pasara nada. Como quien ve llover.

Desde luego es un país asombroso, no cabe duda.

Nosotros seguimos en la lucha. Pocos avances en el huerto. No hemos tenido mucho tiempo. Buenos resultados con cucurbitáceas y leguminosas, el cereal regular, tal vez falta de humedad. También este verano ha sido abrasador, si sirve de explicación. Pero sobre todo el tiempo. Casi no hemos tenido tiempo para dedicarle a los animales y el huerto. La reforma de la casa nos absorbe casi completamente. Las gallinas no consiguieron adaptarse a la vida en libertad. Ya explicamos en otro post que nos las dieron con el pico cortado y acostumbradas a vivir en espacios pequeños. No sobrevivieron a la naturaleza salvaje. Espero que no nos pase lo mismo.

Seguiremos contando novedades.

Que no decaiga la alegría.

Saludos y libertad. ;)
 
Imagina una comunidad autosuficiente, qua actúa localmente para satisfacer sus necesidades, pero piensa en la solución a los problemas globales y no duda en acudir a la información que ofrece internet para optimizar sus técnicas de cultivo y nutrirse de nuevas ideas que puedan ser útiles para la colectividad. Despiertas, revisas cómo van creciendo tus frutas y verduras. Tomas tu bicicleta y vas con los vecinos a intercambiar productos locales. Trabajas poco y te dedicas primordialmente a la creación artística y a la convivencia social. No ganas mucho dinero, pero no importa porque las relaciones sociales no se basan en la competitividad ni en presumir quien tiene más que el otro. Los habitantes de la comunidad han asumido una vida frugal basada en la simplicidad voluntaria. De vez en cuando, los habitantes de la comunidad se reúnen en Asambleas para debatir y decidir con Democracia directa el porvenir de todos. ¿Es una utopía?, se trata de las llamadas aldeas en transición.

Las comunidades en transición son una iniciativa que alcanzó notoriedad cuando la ambientalista Louise Rooney exhortó a la comunidad pesquera de Kinsale, Irlanda a tomar medidas políticas y económicas orientadas hacia una verdadera sustentabilidad. Ideas que se extendieron a Totnes, Inglaterra, bajo el liderazgo de Rob Hopkins durante 2005 y 2006. Ambos proyectos sustentados en los principios de permacultura promovidos por Bill Mollison desde los años setenta, han estado evolucionando notoriamente y han lanzados al mundo un nuevo modelo de desarrollo comunitario:

"Los dos desafíos más duros a los que se enfrenta la raza humana en el inicio del siglo XXI son el Calentamiento Global y el Pico del Petróleo. El primero está bien documentado y es muy visible en los medios de comunicación. El Pico del Petróleo, sin embargo, permanece por debajo del radar para la mayoría de la gente. Sin embargo el petróleo, precursor de la era de la disponibilidad siempre decreciente de combustibles fósiles, puede bien desafiar la estabilidad económica y social que es esencial si queremos mitigar las amenazas que muestra el Calentamiento Global.”

Ante tal escenario, es necesario pensar cómo la humanidad va a encaminarse a una nueva fase histórica, con mayores daños ambientales, más escasez, mayor población, etc. Por ello es menester cambiar el paradigma del crecimiento ilimitado y reorientar la economía para llevar a cabo una transición hacia una nueva era civilizatoria basada en principios verdaderamente sostenibles.

Las Iniciativas de Transición se basan en cuatro supuestos básicos:


Que en un futuro será inevitable vivir con un consumo de energía mucho más bajo, y que es mejor planificar esta realidad para evitar un colapso.
Que nuestras comunidades y asentamientos carecen actualmente de mecanismos que permitan afrontar las dificultades relacionadas al pico del petróleo.
Que tenemos que actuar colectivamente, y tenemos que actuar ahora.
Que con ingenio colectivo podemos diseñar creativa y proactivamente nuestro descenso energético, podemos construir formas de vida que estén más conectadas a la naturaleza y que reconozcan los límites biológicos del planeta.


Esperar a que los gobiernos nacionales promovieran esta transición, cuando éstos se encuentran cada vez más supeditados al poder de las corporaciones e intereses económicos, sería una pérdida de tiempo, por ello fue necesario actuar de manera local, de forma inmediata y ejemplar. Demostrar que sí existe otro camino alternativo y que los primeros pensadores anarquistas, como Pierre Joseph Proudhon, Mijaíl Bakunin, Piotr Kropotkin, Lev Tolstói y Ricardo Flores Magón, podrían ser los precursores de un modelo funcional que, a través de la jovenlandesalización de la sociedad, permitiera construir una comunidad igualitaria, solidaria, autosuficiente y sustentable.

Las aldeas en transición se encuentran en marcha en Reino Unido, su idea principal es dar a conocer un modo de vida más sostenible y desarrollar la resiliencia, la cual se en dos aspectos: reducir su gasto energético y aumentar la producción local de recursos.

Las diferentes formas en que se ha llevado a cabo esta iniciativa, incluyen actividades como la creación de huertos comunitarios, empresas de intercambio de residuos, reparación, reciclaje de objetos antiguos en lugar de tirarlos e incluso en algunas localidades, el uso de una moneda local. Todo ello pretende potenciar el consumo de productos locales o de máxima proximidad. Todas las aldeas alternativas comparten el objetivo de generar conciencia sobre el hecho de que la vida sin petróleo podría ser mucho más agradable, que se puede vivir en comunidad de forma que las emisiones de carbono se reduzcan y esto signifique más prosperidad y resistencia.

Esta transición es la respuesta de comunidades que avizoran el declive de la Era Industrial, marcada por el Pico del Petróleo. La referencia es un presente que depende de los combustibles fósiles, la producción y el consumo descontrolado, la destrucción de ecosistemas y biodiversidad y la mayor desigualdad social. Al ver estos problemas, se busca construir otro modelo basado en la relocalización de la producción, el uso eficiente de la energía y la producción de bienes que se puedan obtener de manera sostenible, la preeminencia de la colectividad, la recuperación de las habilidades para la vida y la armonía con el resto de la naturaleza.

Cada vez son más las comunidades que pretenden orientar sus esfuerzos hacia la llamada transición. Aunque este movimiento tiene su origen en Inglaterra y es mejor conocido en los países del primer mundo, vale la pena señalar que rasgos similares han existido desde tiempos inmemoriales en numerosos pueblos que aún resisten los embates de una globalización que tiende homogeneizar los criterios sociales hacia un capitalismo devorador basado en la competencia y la acumulación de riquezas. En el contexto mexicano, valdría la pena conocer los lazos comunitarios y prácticas sostenibles que mantienen algunas comunidades indígenas, como es el caso de los caracoles zapatistas, de los cuales hablaré ulteriormente.

Aldeas en transición: experimento social y ambiental ~ decrecimiento
 
Otras iniciativas interesantes, esta vez en Galicia:

El proyecto Granxafamiliar.com nace a partir de una investigación llevada a cabo en Galicia e Irlanda entre el año 2003 y 2006 y financiada por la Fundación Feiraco, por el Grupo de Investigación Sociedad, Tecnología y Territorio del Instituto Universitario de Estudos e Desenvolvemento de Galicia (GIS-T IDEGA) de la Universidad de Santiago de Compostela. Estuvo centrada en el análisis socioeconómico, cultural y tecnológico de las familias agrarias productoras de las cooperativas Feiraco y Drinagh. Pudimos cuantificar, entre otros temas, la dimensión de la producción agraria familiar destinada al autoconsumo y parcialmente comercializada por canales informales, que en Galicia pueden llegar a representar unas rentas potenciales de unos 12.000-16.000 euros promedio por familia siendo los productos muy diversos, tales como carnes variadas de vacuno, lechón, aves diversas como gallo, pavo, faisán, etc; frutas diversas denominadas “del país” incluidos frutos secos como castañas, nueces, etc.; hortalizas variadas de todo tipo, patatas, grelos, zanahorias, lechugas, además de productos elaborados como quesos, miel…

Granxafamiliar.com está dirigido a las familias agrarias productoras de Galicia que tradicionalmente practicaron el policultivo y la multifuncionalidad rural; que en el pasado destinaban su producción básicamente al autoconsumo familiar y que actualmente están en disposición de introducir en el mercado dicha producción. Y por el lado de la demanda cualquier comprador, sea familia, colectivo, empresa en general, instituciones sociales, etc. que se sientan atraídos por los precios, la calidad de los productos y por una nueva forma de comercio que podemos calificar como la más justa para Galicia. Se trata de establecer canales de información y de rentas entre el medio rural y el urbano.

En diciembre del año 2008, los productores de Granxa Familiar y los miembros del Grupo de Investigación Sociedad, Tecnología y Territorio de la Universidad de Santiago de Compostela que impulsan el proyecto, acordaron crear la asociación sin ánimo de lucro ADAF: Asociación para el Desarrollo de la Agricultura Familiar. Esta asociación comparte los mismos fines que Granxa Familiar y pretende darle continuidad y gestionar este proyecto de I+D+i que sustenta en la actualidad la Universidad de Santiago.

En la reunión de constitución del mes de diciembre de 2008, a la que asistieron la práctica totalidad de los productores participantes en este proyecto y los miembros del grupo de investigación que lo impulsa, se procedió al debate, consenso y aprobación de los distintos artículos que componen sus estatutos; se definió el sistema de cuotas para los socios productores y no productores, se eligieron los distintos cargos de la Junta Directiva y a su vez, se señalaron las posibles actuaciones para impulsar el crecimiento y viabilidad de la asociación.

En febrero del año 2009 la Junta Directiva mantuvo su primera reunión, con el fin de diseñar las principales líneas de trabajo de la asociación. Entre ellas están el diseño de dos programas de visitas a las granjas con una doble vertiente, una didáctica dirigida a los centros de enseñanza, y otra turística para las familias de origen urbano con interés en conocer el estilo de vida y los sistemas de producción natural de diversas granjas familiares gallegas, además del entorno cultural, social y paisajístico donde se emplazan. También se acordó un calendario de ferias a las que asistirá la asociación y Granxa Familiar para dar a conocer sus productos y actividades, con especial incidencia en Madrid, Barcelona, Bilbao, La Coruña y Vigo. Otros acuerdos tuvieron que ver con la necesidad de impulsar una campaña de información dirigida a las familias sobre el uso eficiente de la actual logística de transporte que Granxa Familiar tiene con las empresas Integra2 y Tourline Express; así como también la oportunidad de diseñar y ofertar a través de Internet lotes de productos naturales y ecológicos desde cada una de las granjas.

Granxa Familiar trabaja directamente con las familias productoras en la promoción de los productos gallegos de calidad que se ofertan y que los clientes pueden apreciar in situ visitando las granjas. Se trata de un producto de agricultura familiar netamente natural, cuidado con esmero y muy lejos de la producción industrial. La práctica del autoconsumo propia del minifundio tradicional y los alimentos producidos en las granjas alimentaron durante muchas generaciones a las familias gallegas. Es una idea que nos comprometemos a cuidar por ser patrimonio cultural de todos los gallegos y gallegas, y que consideramos nos corresponde a nosotros, generaciones más jóvenes, preservar para evitar su desaparición.

Granxa Familiar
 
Maneras diferentes de hacer las cosas:

CittaSlow


La entrada al pueblo es un arco de columnas de ladrillo crudo con una estatua desportillada de la Virgen María. El reloj de la iglesia, una torre larga y con poca gracia, pintada de naranja pálido -el párroco dirá más tarde que parece una barra de jabón- se detuvo a las 7:25 minutos, algún día, hace muchos años.
En la plaza revolotean varias decenas de garzas blancas que llegan desde Canadá huyendo del invierno, los hombres dan el pasaporte el tiempo en cafés y cantinas con partidas de dominó, póker o billar; los niños juegan, los abuelos descansan. Por sus calles angostas la gente camina despacio, como contando los pasos; otros se asoman desprevenidos a los balcones de sus casas de madera, pintadas de azul, amarillo o verde, de las que cuelgan orquídeas, helechos y novios.
Aquí, como en la mayoría de pueblos, la gente vive sin afanes. Pero Pijao no es un pueblito común y corriente: está cerca de convertirse en la primera localidad de América Latina dentro de la red internacional de Cittaslow (ciudad lenta, en italiano) una organización mundial con sede en Italia que reúne a cerca de 150 ciudades que viven en comunión con la naturaleza, la cultura local y la comida sana, y que les brindan a sus pobladores una buena calidad de vida y, sobre todo, mucha tranquilidad.
La gestora de esta iniciativa se llama Mónica Flórez, una comunicadora e investigadora etnográfica que Nació en Pijao pero que se fue de allí durante 20 años, tiempo en el que trabajó como docente universitaria y reportera. También vivió en Estados Unidos e Israel. Y hace siete años decidió regresar, huyendo del ritmo desbocado de las ciudades y con el sueño de hacer algo bueno por su municipio, que aún no se recuperaba del terremoto de enero de 1999 y que estaba muy afectado por la crisis cafetera y por el conflicto armado. Una toma guerrillera ocurrida en el 2001 espantó a mucha gente.
Entonces, Mónica se preguntó qué hacer con un pueblo tan bello y rico en naturaleza, y se le ocurrió que una salida podría ser el turismo rural sustentable. "Tenemos montañas, tierra caliente y de páramo, osos de anteojos, cientos de pájaros, palmas de cera, aire puro, ríos y cascadas". Alguien le habló del movimiento Cittaslow y dijo: "eso es lo que necesitamos".
Viajó a Orvieto, en Italia, donde queda la sede de Cittaslow y dijo: "yo vivo en un pueblo colombiano que puede pertenecer a esta organización, ¿qué hay qué hacer?".
Volvió a Pijao y empezó a fomentar la idea con familiares, amigos y vecinos, con el alcalde de turno. Siguiendo las recomendaciones que le hicieron en Orvieto, emprendió un plan para embellecer las fachadas y otro sobre huertas orgánicas comunitarias con mujeres y niños, al igual que un programa de educación ambiental y gastronomía saludable con el apoyo del Sena y otras instituciones. Y así nació Pijao Cittaslow, en el 2006, fundación de la que ella es presidenta y que la llevó a ser concejal del municipio en el periodo anterior.
La propuesta ha estado en tres planes de desarrollo municipales, recibió en el 2012 el premio de 'Experiencia significativa' por parte de la Federación Colombiana de Municipios y también, el año pasado, estuvo a punto de llegar a feliz término. Pero el alcalde, Julián Vergara, un hombre convencido de este proyecto, murió de un infarto y los trámites quedaron parados. Tenía 66 años.


Pijao primera ciudad en Latinoamrica en ingresar a la red mundial de ciudades sin prisa - Noticias de Salud, Educacin, Turismo, Ciencia, Ecologa y Vida de hoy - ELTIEMPO.COM


Libertad y alegría.
 
“¡Pero eso sería ANARQUÍA!”

Ésta crítica cotidiana, asume la idea de que la anarquía es un estado de caos carente de ley, donde asesinos, ladrones y violadores (entre otros criminales violentos) deambularían por todas partes sin sufrir consecuencia alguna por sus acciones violentas e inmorales. En la ausencia de un gobierno, se supone, las reglas jovenlandesales dejarían de ser acatadas por completo mientras que la sociedad sucumbe en una “guerra de todos contra todos”. Este horrendo escenario es enseñado a cada joven estudiante mediante la “educación” administrada por el gobierno, pero esto no cambia el hecho de que ésta idea es decidídamente falsa. Existe una gran cantidad de graves problemas con dicha situación hipotética. Como el resto de este artículo demostrará, este miedo es inculcado en los menores no porque sea cierto, sino porque sirve a los interéses del estado y sus benefactores.

Para empezar, asume por un momento (a pesar de lo que veremos más adelante) que dicho escenario realmente ocurriría si el estado desaparece. Ciertamente suena como un escenario horrible. Yo definitivamente no querría que mi vecindario se desbarate entre tiroteos y agresión desenfrenada. Pero hay un punto que señalar aquí. ¡El estado no previene esto! Este tipo de situaciones son bastante comúnes en las ciudades gobernadas por el estado. ¿Pero por qué existiría esto a pesar de la variedad de leyes y del control policial sobre estas leyes? La razón es simple: pohibición estatal.

Como puede verse al examinar los resultados de la prohibición del alcohol durante la ley seca, podemos ver que la prohibición lleva a ciertos comercios al mercado neցro. Muchos de estos mercados neցros son violentos, debido en parte a la batalla contra la aplicación de la ley, pero también porque ya no hay incentivos para competir pacíficamente en el mercado. Siendo que actualmente se está cometiendo un acto criminal que puede llevarlo a uno a prisión o algo peor, los actos violentos contra competidores son simplemente un crimen más. Los carteles de la droja existen debido al estado, como así también cada otra gran organización criminal, incluyendo al juego ilegal.

Más aún, la mayor violencia no es cometida por individuos, sino por organizaciones estatales. Un individuo con inclinaciones violentas puede usar una bomba o una pistola para cometer sus crímenes. Un político con inclinaciones violentas tiene tanques, aviones y ejercitos a su entera disposición. Esto da paso a guerras, opresión tiránica, y a grandes genocidios a la vista de todos. Mientras se supone que el gobierno es necesario para proteger a las personas de la violencia de la anarquía, fueron los gobiernos —y no los anarquístas— quiénes cometieron las mayores atrocidades de la historia.

No fueron anarquístas quiénes perpetraron el Holocausto. Ellos no impusieron el apartheid sudafricano. No fueron anarquístas quiénes dejaron morir de hambre a millones de personas en la Unión Soviética de Stalin. Ellos no cometieron el genocidio de armenios en Turquía. No fueron anarquístas los que mataron a millones de chinos durante el “Gran Salto Adelante”. Ellos no intentaron dar de baja de la suscripción de la vida a cualquiera que tenga algo de educación en Camboya. No fueron los anarquístas quiénes encerraron a japoneses estadounidenses en campos de internación. El gobierno de los Estados Unidos, y no anarquístas, lanzó bombas nucleares sobre Hiroshima y Nagasaki aniquilando a ciento de miles de ciivíles. No fueron anarquístas quiénes legalizaron la esclavitud y la segregación racial. Gobiernos, y no los anarquístas, dieron comienzo a la primera guerra mundial. Los anarquístas no practican sacrificios de niños en Sudamérica. No fueron anarquístas quiénes realizaron experimentos con sífilis en afroamericanos contra su voluntad, tampoco fueron ellos quiénes intencionalmente infectaron a los nativos norteamericanos con viruela. Los anarquístas no estuvieron detrás de las Cruzadas. Tampoco son los anarquístas responsables por la Guerra de los Cien Años. Ellos tampoco impulsaron el imperialismo y colonialismo de las potencias europeas.

Si la historia de la humanidad demuestra algo, es que el estado —cualquier estado, ya sea democrático, dictatorial, o monárquico— representa una amenaza calamitosa hacia la libertad, salud, y bienestar de sus súbditos. Lo que no demuestra de modo alguno, es el supuesto caos y desastre que la anarquía implicaría (según los sistemas de educación estatales, por supuesto). En las palabras del economista Robert Higgs:

“El caos de la anarquía es completamente conjetural; el caos del estado es innegable y objetivamente horrendo.”

Adicionalmente, no hay razón alguna para creer que la hipotética “guerra de todos contra todos” sea una realidad. Para que tal escenario sea válido, uno tiene que aceptar la premisa de que todas las pautas jovenlandesales dejan de ser seguidas una vez que la amenaza de castigo desaparece. No sólo que esto es improbable, sino que se contradice con las experiencias diarias y la postura misma de las personas que se preocupan por esto.

Cuando las personas van al supermecado, no es que pagan porque sino las van a arrestar. ¡Las personas pagan porque éstas están convencidas de que robar está mal! Es ésta la misma razón por la cuál no asaltan a sus vecinos; no es porque los meterían presos por hacerlo, sino porque lo consideran inmoral. En el caso de una sociedad poseída por motivaciones violentas y agresivas, contenidas únicamente por la amenaza de castigo, un pequeño grupo encargado de hacer cumplir la ley sería totalmente incapaz de mantener el orden. Serían simplemente arrollados. La sociedad no se mantiene civilizada y pacífica por la amenaza de una respuesta estatal violenta, sino por sentimientos jovenlandesales generalmente aceptados.

Por supuesto, podrían notar esto si prestaran atención a sus propias reacciones. Las personas no están para nada preocupadas por lo que ellos harían si la anarquía de repente reemplazara al gobierno. Es lo que sus vecinos (especialmente aquellos que no son sus amigos) pueden hacer lo que les preocupa. ¿Pero si la mayoría de las personas saben que ellos no van a perder su jovenlandesalidad si el gobierno desaparece, por qué creen que el resto sí lo hará? Tal conclusión es completamente inconsistente con el sentir general de las personas que estarían en esa situación.

Debemos admitir que, tal como sucede ahora, habrá algunos individuos que cometerán actos agresivos contra otros. Eliminar al gobierno, por supuesto que no eliminará a los asesinos, ladrones y violadores de la sociedad. Aún tendríamos que lidiar con estos individuos. Sin embargo, no se requiere de un gobierno que sea un proveedor monopólico de sistemas de justicia criminal. De hecho, se puede argumentar que un mercado libre puede proveer estos servicios de forma más barata, más efectiva, y más justa.

Agencias de policía compitiendo entre sí estarían forzadas a seguir las mismas pautas jovenlandesales que el resto de la sociedad, además de ser financiadas mediante pagos voluntarios. Como resultado de trabajar dentro del marco del mercado, la competencia les permitiría a los consumidores abandonar las agencias inefectivas o corruptas, y tales agencias perderían financiamiento. Los consumidores serían capaces de elegir entre una variedad de nivéles de protección y acción policial. Las guerras serían virtualmente imposibles sin el poder de cobrar impuestos del estado; métodos de pago voluntarios les permitiría a los consumidores suspender pagos ante cualquier indicio de agresión por parte de sus agencias de seguridad. Un sistema como éste funcionaría de forma más justa, más transparente y con mayor efectividad que el monopolio geográfico de ley y orden que representa el estado.


Sobre el supuesto caos de la anarquía
 
¿Y porque solo agricultura?

Por eso me gusta el concepto que proponen los de Open Source Ecology que más allá de lo que pase con ese proyecto, hay muchas tecnologías que no parece inviable que pudieran ser reproducidas a pequeña escala, en forma de ciclo cerrado o en su mayor parte.

Si te remontas a la Edad Media, ya trabajaban un acero de gran calidad, y sus forjas eran mantenidas por un puñado de personas. ¿Como no ibamos a ser capaces de crear ahora sistemas más eficientes?

La clave es que el conocimiento sea libre, y los modelos lo suficientemente simplificados como para que no se requiera una cantidad demasiado grande de gente, ni de un nivel excepcional, como para no encontrarlos en cualquier ciudad.
Es la autosuficiencia (que no es sino un ciclo cerrado y sostenible) elevado al nivel de tecnología del siglo 20.

El problema es que muchas de estas tecnologías se volvieron complejas, especializadas, y se han desarrollado hacia la gran industria (volúmenes gigantescos), y no hacia el nivel de microproducción.
El reto está en conseguir el nivel de microproducción con una eficiencia cercana a la gran industria. Ni siquiera necesitas superarla, ya que el ciclo cerrado evita los parásitos externos. Lo que pierdes por un lado, lo ganas con creces por otro.

Tal vez no sea necesario ni eficiente llegar a esos niveles.
Con que se fabricaria hierro o acero, con mineral traido de donde?
Pues tal vez sea mas eficiente y barato traer la materia prima prefabricada.
Muchas cosas se hacen a partir de bobinas de chapas, alambre y tubos de diferentes medidas que se transforman en las fabricar.
Yo creo que transformar esa materia es mas asequible y una fabrica cercana tiene mas capacidad para acercarse al cliente y se deja a la superfabrica hacer lo que hace mejor producir muchos productos simples baratos.


Un tipo de pueblo bastanta autosuficiente. El concepto se parece a los kibutz pero este me gusta mas.
cabovolo: Nahalal, un pueblo en círculos
 
Habría que renunciar al Cayenne desde luego. Y a otras muchas cosas más, pero lo planteo así: ¿es posible o imposible en España crear grupos de personas organizadas en ronas rurales cultivando de manera ecológica y trabajando todos por un interés común?

¿Nadie tendría ganas de intentar algo así? ¿Sería eso el demonizado comunismo o se trataría de otra cosa? ¿Habría problemas insuperables de convivencia y respeto o todo sería más o menos armonioso? ¿Es imposible vivir de lo que da una huerta y una conejera y unas gallinas o algo así?

Abro el debate.

Para nada

Muchos estamos en ello...

---------- Post added 09-feb-2014 at 11:05 ----------

¿Cómo va a ser imposible algo que los seres humanos han llevado a cabo durante los últimos 200.000 años?

Otra cosa es que sea divertido.

Como actividad de ocio, no está mal la verdad...

---------- Post added 09-feb-2014 at 11:51 ----------

Busca información sobre las ecoaldeas. Eso que planteas ya está en funcionamiento, aquí en España.
Saludos.

Y cada vez mas...
 
Vean el vídeo There's no tomorrow.

No hay Mañana (There's No Tomorrow) - YouTube

Es realmente interesante.

Saludos cordiales, libertad y alegría.
 

A los Estados no les conviene que la población sepa que otras formas son posibles, por eso se aplasta todo atisbo de que otra manera de vivir es viable y de ahí que se aplastan y barren tribus para que no quede prueba alguna, sólo olvido.
Piaroa - Wikipedia, la enciclopedia libre

Resulta curioso, una noticia hace poco en la que en una zona de México una organización criminal llamada Hermanos Templarios o algo así, sembraba el terror. Los campesinos de la zona organizaron autodefensas, parece que muy efectivas y lograron disminuir la criminalidad. Ahora es cuando el Estado Mexicano, ineficaz en la defensa contra ese cártel, quería que esos grupos de autodefensa formaran parte de la policía local, ejercito...

Da la sensación que a ese Estado su preocupación más era más que surgieran esas iniciativas de autogestión, y en concreto de la autogestión de la defensa. La noticia salió en un telediario, pero hay muchas entradas en Google.

Los Estados necesitan de la delincuencia porque es la excusa para tener fuerzas armadas de control. Cuando hay delincuencia el pueblo sale pidiendo más policía, cuando lo que el pueblo necesita es que un criminal, un violador, esté entre rejas y para siempre.
 
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