Idiotas tú y tu padre.
Argumentazo, el insulto.
Sobre todo porque eso mismo pasará en el Madrid de la Ayuso. O en la Prusia Eslava alejada del supremacismo bávaro.
El nacionalismo (alemán, español, catalán) es un ejercicio excelente de egoísmo colectivo como respuesta a lo que el capitalismo -exhausto- ya no puede dar e induce. Y puede ser pardo-alemán, verde-español o amarillo-catalán: un fase superior del capitalismo en quiebra, señor.
Pero eso queda para los 'pobres', que, astutamente, se quedan en la casa maltrecha y en números reales os reducen a los nacionalistas catalalanes y españoles de Catalunta al 25% 'fifty-fifty' repartidos de la población
pija, la que -aún- llega a fin de mes. El resto, desfecto del 'sistema' , aguarda,
empobrecido y asqueado su momento.
Y ojo, que las revoluciones (trapicheos) políticas son palaciegas y las de calle (reales), son sociales y populares, caballero. De las que ahorcan.