Los medios pueden decir misa, la realidad es muy de derechas y la van a ver próximamente en sus barrios con miedo a salir a la calle, en sus familiares hombres con la vida hundida, en sus nóminas rebajadas, en sus impuestos aumentados, en sus servicios públicos reducidos, en definitiva, en su país arruinado. La culpa se la echarán a los Muy de derechas, da igual, lo que quieran. Pero esa realidad se la van a comer con papas.