Pareto
Madmaxista
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Bueno tratare primero de explicar que es el subjetivismo, para luego explicar el objetivismo y como vivimos en una sociedad supuestamente objetiva que nos esclaviza, hasta que colapse.
Bueno para entender el subjetivismo hay que tener claro que nadie lo sabe todo (nadie conoce la realidad) y mucho menos sabe que va a pasar mañana. Esto es una realidad inmutable, cada persona tiene una idea de cómo será el futuro, pero nadie lo sabe a ciencia cierta. Dependiendo de cómo ve cada uno el futuro, valora las cosas en el presente, luego el valor que se da a las cosas es un valor subjetivo, basada en la realidad que cada uno maneja, Kant.
A partir de esta subjetividad y de las subjetividades de las personas que conforman la sociedad se establecen unos precios en el mercado (si este es libre, que actualmente no es el caso) y se toman decisiones vitales, la acción humana Mises.
Véase la imposibilidad de dar previsiones económicas, en un mundo en constante cambio y que depende de las realidades de los individuos que participan.
Esta subjetividad de la personas lleva a que el mercado sea un lugar de choque de intereses y un lugar que aporta información de hacia dónde van las preferencias de la gente, de acuerdo a los bienes que la acción humana suministra.
Pero como hemos dicho el mercado no funciona y esto ocurre porque las normas que lo regulan son establecidas por una minoría que desecha las realidades de los individuos que participan en él.
El objetivismo por el contrario establece una serie de bases inmutables, que desechan que la realidad del individuo y su acción, modifican a cada instante el mundo.
En el mundo del objetivismo son posibles afirmaciones como "este años subimos las pensiones", "este año subimos los convenios colectivos", "este año…"
Ni que decir tiene que el objetivismo es el terreno de juego de los políticos, si no pudiesen lanzar semejantes frases, nadie se los tomaría en serio, pues nos han educado en un mundo objetivista, fomentado por los que administran el Estado.
El choque de entre los dos mundos se produce en unas entidades llamadas bancos, donde bienes que no son valorados por la gente se van acumulando y figuran a precios objetivos y no a su precio de mercado (por lo que los valora la gente).
Este artificio se mantiene a base de esclavizar al personal con nuevos incrementos de impuestos e impresion de moneda, para que sus números no se vayan a la cosa, aunque con cada nueva subida de impuestos la realidad se transforma a peor y la brecha entre la economía real subjetiva y la objetiva se va haciendo más grande, hasta un día que todo colapsara, esperemos que sea pronto y nos olvidemos de los artificios objetivistas y los vendedores de humo de ese sistema los políticos, los burócratas y sus cómplices los banqueros.
Y lo más importante que la gente se dé cuenta que los conflictos se resuelven democráticamente y con normas de convivencia, no eligiendo iluminados que establecen bases objetivas de cosas que son subjetivas y que dependen de todos.
Resumiendo: Las cosas son valoradas por cada uno y en función de un futuro incierto, nadie (ningun politico) conoce ese futuro ni nuestras valoraciones, luego nadie va a mejorar un sistema democrático que nos permita llegar a acuerdos de convivencia, de acuerdo a nuestras realidades. Los políticos son vendedores de humo y no son necesarios para nada más que para aportar ideas y ver si estas se adecuan a nuestras realidades. No darse cuenta de esto nos conduce a ser esclavos de las realidades de los políticos y asociados (sean de derechas, de izquierdas o de Marte), Dios los tenga en su gloria.
PD: Espero que se entienda, tengo poquito tiempo. :o
Bueno para entender el subjetivismo hay que tener claro que nadie lo sabe todo (nadie conoce la realidad) y mucho menos sabe que va a pasar mañana. Esto es una realidad inmutable, cada persona tiene una idea de cómo será el futuro, pero nadie lo sabe a ciencia cierta. Dependiendo de cómo ve cada uno el futuro, valora las cosas en el presente, luego el valor que se da a las cosas es un valor subjetivo, basada en la realidad que cada uno maneja, Kant.
A partir de esta subjetividad y de las subjetividades de las personas que conforman la sociedad se establecen unos precios en el mercado (si este es libre, que actualmente no es el caso) y se toman decisiones vitales, la acción humana Mises.
Véase la imposibilidad de dar previsiones económicas, en un mundo en constante cambio y que depende de las realidades de los individuos que participan.
Esta subjetividad de la personas lleva a que el mercado sea un lugar de choque de intereses y un lugar que aporta información de hacia dónde van las preferencias de la gente, de acuerdo a los bienes que la acción humana suministra.
Pero como hemos dicho el mercado no funciona y esto ocurre porque las normas que lo regulan son establecidas por una minoría que desecha las realidades de los individuos que participan en él.
El objetivismo por el contrario establece una serie de bases inmutables, que desechan que la realidad del individuo y su acción, modifican a cada instante el mundo.
En el mundo del objetivismo son posibles afirmaciones como "este años subimos las pensiones", "este año subimos los convenios colectivos", "este año…"
Ni que decir tiene que el objetivismo es el terreno de juego de los políticos, si no pudiesen lanzar semejantes frases, nadie se los tomaría en serio, pues nos han educado en un mundo objetivista, fomentado por los que administran el Estado.
El choque de entre los dos mundos se produce en unas entidades llamadas bancos, donde bienes que no son valorados por la gente se van acumulando y figuran a precios objetivos y no a su precio de mercado (por lo que los valora la gente).
Este artificio se mantiene a base de esclavizar al personal con nuevos incrementos de impuestos e impresion de moneda, para que sus números no se vayan a la cosa, aunque con cada nueva subida de impuestos la realidad se transforma a peor y la brecha entre la economía real subjetiva y la objetiva se va haciendo más grande, hasta un día que todo colapsara, esperemos que sea pronto y nos olvidemos de los artificios objetivistas y los vendedores de humo de ese sistema los políticos, los burócratas y sus cómplices los banqueros.
Y lo más importante que la gente se dé cuenta que los conflictos se resuelven democráticamente y con normas de convivencia, no eligiendo iluminados que establecen bases objetivas de cosas que son subjetivas y que dependen de todos.
Resumiendo: Las cosas son valoradas por cada uno y en función de un futuro incierto, nadie (ningun politico) conoce ese futuro ni nuestras valoraciones, luego nadie va a mejorar un sistema democrático que nos permita llegar a acuerdos de convivencia, de acuerdo a nuestras realidades. Los políticos son vendedores de humo y no son necesarios para nada más que para aportar ideas y ver si estas se adecuan a nuestras realidades. No darse cuenta de esto nos conduce a ser esclavos de las realidades de los políticos y asociados (sean de derechas, de izquierdas o de Marte), Dios los tenga en su gloria.
PD: Espero que se entienda, tengo poquito tiempo. :o