Pues hombre, he vivido 19 años en Madrid, 3 años en Elche y 21 en Valencia, así que creo que estoy en condiciones de poder opinar.
En Madrid y en Alicante hay mucho iluso, pero impera en carácter abierto y sociable. En Valencia los sociables son la excepción y lo que impera son los iluso, desconfiados y bordes.
Suelo poner un ejemplo que me sucedió y que nadie me ha rebatido hasta ahora: yo en verano suelo ir solo a la playa y tuve una temporada que me dio por fumar. Bien, pues en Valencia un día me quedé sin gas en el mechero y me acerqué a la toalla de al lado a pedir fuego. Según me iba acercando ya noté que me miraban de reojo como diciendo "a ver qué quiere éste, que seguro que va a pedir algo". Me dieron fuego sin mediar palabra ni para despedirse, y no me quitaron ojo de encima mientras tuve el mechero en la mano.
Esa misma situación se me dio después en Alicante y no sólo me dieron fuego sino también el cigarro, me invitaron a una cerveza y acabamos cenando todos juntos por la noche.
Es sólo un ejemplo, pero que representa perfectamente el carácter de la gente en uno y otro lugar. Vamos, es que no es secreto para nadie que si entras en un horno en Valencia no te dan ni los buenos días, y si preguntas qué lleva la napolitana te dicen "crema", mientras que en Alicante vendría a ser como "pues ésas llevan crema y están durcecicah, y tengo éstas de chocolate y éstas de jamón... ¡pero del bueno!; prueba las tortas de sal, que están ahí pa eso, y si tesperas 5 minuticoh te saco los croasanes que están en el horno y están pa chuparse loh dedoh; ah, y tengo coca salada que la acabamos de hacer, mu rica también".
El valenciano es borde, seco, desconfiado y receloso. No te abre la puerta de su casa ni para vendértela.
21 años viviendo en Valencia y alguno de mis amigos no sé ni dónde vive. Tengo más gente en Alicante de los 3 años que estuve allí, y no me haría falta ni avisarles para ir a hacer una visita o para quedarme una semana si quiero.
La diferencia es abismal, pero vosotros no lo veis porque sois así y os parece lo normal.
Bonus track: una vez me llevé a Madrid a uno de mis amigos de Valencia. En un momento dado nos paramos en un semáforo a esperar a que se pusiera verde para los peatones y llegó un hombre, se puso al lado y empezó a hablarnos con cosas triviales como "pues está hoy el día bueno, no sé para qué he bajado con la chaqueta, a ver si hay suerte y se queda así una semanita siquiera; ¿no tenéis calor?", y mi amigo se quedó flipando de que un extraño se pusiera a hablarnos, cuando allí es lo más normal.
Es que en Valencia la gente no te habla ni cuando estás esperando el ascensor, es acojonante lo secos que sois, leche. No me acostumbraré jamás.
