Creo que la traducción del inglés nos lleva a engaño. ¿Se ha fundido el núcleo o se han fundido las barras?. Que no es lo mismo.
Ahí va un artículo:
Por qué han explotado los reactores nucleares de Fukushima, en Japón
El día 11 de Marzo de 2011 se produce un terremoto de grado 9 en japón, bastante cerca de Daiichi, donde está la central nuclear de Fukushima, seguido de un gran tsunami que arrasa las costas de japón.
La central de Fukushima está junto al mar y recibe un fuerte castigo. Los reactores se apagan automáticamente insertando las barras de control, limitadoras de neutrones, entre el uranio, pero es imposible frenar la reacción totalmente, lo cual tardará días en suceder. El problema surge cuando el sistema de refrigeración falla.
A causa de esta falla el reactor se recalienta y el vapor en el interior del reactor alcanza presiones peligrosas. Es liberado vapor por la válvula de seguridad y este vapor estalla, destrozando la mitad del edificio de contención secundaria. Por suerte la cámara de contención principal resiste.
fukushima, antes y despues
Posteriormente siguen luchando por enfriar el núcleo restableciendo el bombeo de refrigeración, incluso con agua de mar enriquecida con boro, que actúa como barra de control líquida. La temperatura baja y se controla el problema.
explosión en central de Fukushima
Pero, ¿Por qué ha explotado el gas que se ha emitido? ¿No es simplemente vapor de agua?
Pues parece que a las altas temperaturas que se han alcanzado en el reactor nuclear, el agua ha reaccionado con el material (Zircaloy, una aleación de circonio) que envuelve a las barras de uranio, oxidándolo y liberando hidrógeno en la reacción química. Así, ese vapor liberado contenía un alto porcentaje de hidrógeno, el cual es muy inflamable y ha estallado en contacto con el oxígeno del aire de la atmósfera.
Se ha hablado de la posible “fusión” del nucleo como un gran riesgo. ¿Fusión? Sí, ¿nuclear? No.
Se trata de usar la palabra fusión en su sentido de “derretirse”. Las barras de óxido de uranio (y césio y yodo) y su envoltura, se derriten, fundiéndose, a causa del gran calor. La temperatura de fusión del óxido de uranio es de unos 3000 grados celsius.
La cámara de confinamiento, de acero y cemento debería poder contener indefinidamente este uranio fundido, junto a la vasija contenedora también fundida, hasta que se enfríe.
¿Puede haber una explosión nuclear de fisión? La respuesta es no. El uranio no está lo suficientemente enriquecido.
¿Cual es el principal riesgo? Que no se refrigere lo suficiente la vasija, se inicie la fusión o derretimiento del núcleo, o al menos desaparezca la envoltura aislante de Zircaloy, y que haya que liberar a la atmósfera vapores con Césio y Yodo radiactivo, muy peligrosos para la salud, como pasó en el accidente de Three Mile Island, en Harrisburg. Y en el caso extremo, que la vasija de contención se haya debilitado por el terremoto y por la explosión del hidrógeno, y la presión y el calor la agrieten o rompan. Entonces la fuga radiactiva sería mayor alcanzando niveles similares al accidente de Chernobil, pero de expulsión de radiación más lenta, pues las reacciones nucleares están casi paradas.
Podemos leer el estado actual de las plantas nucleares de Fukushima en este enlace, del Japan Atomic Industrial Forum.
Podemos ver, por ejemplo, que en los edificios de los reactores 5 y 6 han abierto agujeros en el techo para evitar acumulación de hidrógeno y evitar posibles explosiones.
Y ahí va el link:
Por qué han explotado los reactores nucleares de Fukushima, en Japón