Nos vamos a Damasco:
Hechos 9:3-6 Reina-Valera 1960 (RVR1960)
3 Mas yendo por el camino, aconteció que al llegar cerca de Damasco, repentinamente le rodeó un resplandor de luz del cielo;
4 y cayendo en tierra, oyó una voz que le decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues?
5 El dijo: ¿Quién eres, Señor? Y le dijo: Yo soy Jesús, a quien tú persigues; dura cosa te es dar coces contra el aguijón.
6 El, temblando y temeroso, dijo: Señor, ¿qué quieres que yo haga? Y el Señor le dijo: Levántate y entra en la ciudad, y se te dirá lo que debes hacer.
Pero:
7 Y los hombres que iban con Saulo se pararon atónitos, oyendo a la verdad la voz, mas sin ver a nadie.
Vio o no vio Pablo a su dios?
I Corintios 9
1 ¿No soy yo libre? ¿No soy yo apóstol? ¿Acaso no he visto yo a Jesús, Señor nuestro? ¿No sois vosotros mi obra en el Señor?
No dice este versículo que el lo vio?
El segundo incidente aparece en el mismo libro de los Hechos con solo 15 capítulos entre ellos. Por lo tanto la historia es constante y firme, verdad?
Hechos 26
12 En este empeño iba hacia Damasco con plenos poderes y comisión de los sumos sacerdotes;
13 y al medio día, yendo de camino vi, oh rey, una luz venida del cielo, más resplandeciente que el sol, que me envolvió a mí y a mis compañeros en su resplandor.
14 Caímos todos a tierra y yo oí una voz que me decía en lengua hebrea: "Saúl, Saúl, ¿por qué me persigues? Te es duro dar coces contra el aguijón."
15 Yo respondí: "¿Quién eres, Señor?" Y me dijo el Señor: "Yo soy Jesús a quien tú persigues.
16 Pero levántate, y ponte en pie; pues me he aparecido a ti para constituirte servidor y testigo tanto de las cosas que de mí has visto como de las que te manifestaré.
Jesús le dice que el le apareció a Pablo, pero lo gracioso es que Pablo no menciona que el le apareció sino que solo oyó uno voz.
Lo mas importante de este relato es que Pablo dice que Jesús personalmente le dio instrucciones para su función como servidor y testigo. Y fue el mismo Jesús quien lo nombro como su ministro.
No era lo suficientemente importante esto como para ser reportado en el capitulo 9 de este libro de Hechos, cuando la historia se conto por primera vez?
Jesús le dice que para esto era que le había aparecido, para hacerlo ministro. Como es que se le olvido a Pablo un detalle tan importante la primera vez que el reporto el encuentro con Jesús? Se le olvido? No será que según lo conto, lo añadió?
No se menciona aquí en este segundo relato lo que se dice en el primero. En el primero se dice que el entre a la ciudad de Damasco y que allí espere por instrucciones.
Pero mejor leamos de el mismo NT.
Hechos 9
6 Pero levántate, entra en la ciudad y se te dirá lo que debes hacer.
7 Los hombres que iban con él se habían detenido mudos de espanto; oían la voz, pero no veían a nadie.
8 Saulo se levantó del suelo, y, aunque tenía los ojos abiertos, no veía nada. Le llevaron de la mano y le hicieron entrar en Damasco.
9 Pasó tres días sin ver, sin comer y sin beber.
10 Había en Damasco un discípulo llamado Ananías. El Señor le dijo en una visión: Ananías. El respondió: Aquí estoy, Señor.
11 Y el Señor: Levántate y vete a la calle Recta y pregunta en casa de Judas por uno de Tarso llamado Saulo; mira, está en oración
12 y ha visto que un hombre llamado Ananías entraba y le imponía las manos para devolverle la vista.
13 Respondió Ananías: Señor, he oído a muchos hablar de ese hombre y de los muchos males que ha causado a tus santos en Jerusalén
14 y que está aquí con poderes de los sumos sacerdotes para apresar a todos los que invocan tu nombre.
15 El Señor le contestó: Vete, pues éste me es un instrumento de elección que lleve mi nombre ante los gentiles, los reyes y los hijos de Israel.
Aquí podemos ver que quien le da la encomienda a Pablo es un tal Ananias y no Jesús.
Ahora si leemos Hechos 22
6 Pero yendo de camino, estando ya cerca de Damasco, hacia el mediodía, me envolvió de repente una gran luz venida del cielo;
7 caí al suelo y oí una voz que me decía: "Saúl, Saúl, ¿por qué me persigues?"
8 Yo respondí: "¿Quién eres, Señor?" Y él a mí: "Yo soy Jesús Nazareno, a quien tú persigues."
9 Los que estaban vieron la luz, pero no oyeron la voz del que me hablaba.
10 Yo dije: "¿Qué he de hacer, Señor?" Y el Señor me respondió: "Levántate y vete a Damasco; allí se te dirá todo lo que está establecido que hagas."
11 Como yo no veía, a causa del resplandor de aquella luz, conducido de la mano por mis compañeros llegué a Damasco.
Podemos ver que los que estaban con Pablo aquí vieron la luz pero no escucharon la voz, mientras que en los otros relatos ellos oyeron la voz pero no vieron nada. Vemos aquí otra vez el cumulo de contradicciones que siempre rodean a Palo.