Olvídate de que la razón de trabajar sea la obtención del dinero.A mí ahorrar e invertir compulsivamente no me ha quitado de trabajar (de momento, aunque ya me falta poco), pero me ha permitido reorientar mi carrera hacia trabajos más lucrativos sin traumas ni miedo al cambio. Esa es la principal ventaja del ahorro, el coste de oportunidad de poder estar en el sitio y el momento adecuados, cuando otros están atados por deudas o consumismo.
El ser humano necesita pocas cosas : poca comida, un sitio donde dormir, y un pequeño grupo social compuesto por su pareja y 4 amigos para ser plenamente feliz. Lo demás es ingeniería social.
Millones de generaciones anteriores han vivido mucho mejor que nosotros sin tener tanto miedo.
Es absurdo vivir una vida perversos trabajando sin parar, con la meta de tener una vejez " confortable " . Es absurdo " adquirir " un piso en el que nunca estás, porque tienes la vida HIPOTECADA , para pagar esas 4 paredes.
No son los neցros los que pagarán nuestras pensiones ; somos nosotros los que estamos pagando a costa de esclavizar nuestra aventura de vivir, las multimillonarias pensiones de quien nos esclaviza.
yo no he pedido un crédito en la vida . Nunca he recibido dinero de nadie, ni siquiera ayuda de mis padres y desde niño anduve sobrado, porque solo gasté una parte y guardé otra parte.Hay que ahorrar, para el día de mañana. Yo hago caso de mis abuelos, no del márqueting consumista.
De vez en cuando un caprichillo, y alimentarse bien.
Pero viajecitos cada dos por tres, ropa de marca (mirad, soy un manirroto!!) Y demás, pues NO. Que todos estos que hablan de que ahorrar y guardar dinero, es de simples, son luego los mismos que tienen que andar haciendo malabares y tirando de CRÉDITO o PRÉSTAMOS (Cofidis, etc...) cuando les sale un imprevisto: se les rompe la lavadora y no tienen 300 euros para cambiarla, tienen que pagar el dentista a plazo que les a puesto una funda por 200 euros, por que no tienen nada ahorrado, eso sí, van por pa calle con sus bambas Nike de 100 euros, su iphone de 700 euros, y se fué ese mes de postureo a Berlín tres días, con sus amigotes, mientras su mujer le ponía los cuernos en su casa.
Payasos y payasas así los hay a millares.
A tomar por ojo ciego manirrotos.