No hace falta que me llames de Ud.
No lo dudo, pero no todo el monte es orégano. Como he dicho antes, es muy posible que una parte de la toponimia vascoide (es decir, que recuerda al euskera) del Pirineo provenga de algún dialecto del ibérico o de un romance influido por él. Por ejemplo, el resultado africado de la lateral doble
-ll- que se da en el pirenaico (p.ej.
castiecho) y en algunos romances como el asturianu occidental (la llamada che vaqueira) no existe en euskera pero es muy probable que se deba a un sustrato ibérico.
Normal, porque las lenguas romances provienen del latín; pero unas han evolucionado más que otras. Así, por ejemplo, tenemos por un lado el catalán
Sallent y, por otro, el pirenaico
Saliente, ambos provinientes del mismo étimo latino.
Como he dicho antes, la mayoría de las lenguas que se han hablado en este planeta no han dejado textos escritos, pero a veces se conservan sus restos en la toponimia y préstamos a otras lenguas. Otras, como p.ej. el ibérico tienen textos, pero apenas somos capaces de entenderlos.