Wüstenfuchs
Generalfeldmarschall
- Desde
- 7 Dic 2021
- Mensajes
- 2.072
- Reputación
- 5.738
Denys Yaroslavskyi está enojado.
Como comandante de una Unidad Especial de Reconocimiento de Ucrania, luchó en la ofensiva sorpresa de Ucrania en Járkov en el otoño de 2022, que hizo retroceder una oleada turística rusa inicial hasta la frontera.
Pero ahora Denys y sus hombres se enfrentan a la perspectiva de volver a hacer lo mismo.
En los últimos días, las fuerzas rusas han logrado avances pequeños pero significativos a lo largo de la frontera en la región de Kharkiv.
Sus avances tienen sólo unos pocos kilómetros de profundidad, pero se han tragado unos 100 kilómetros (62 millas) de territorio ucraniano. En el este de Ucrania, más fuertemente defendido, a Rusia le llevó meses lograr lo mismo.
Denys quiere saber qué pasó con las defensas de Ucrania.
“No había una primera línea de defensa. Lo vimos. Los rusos simplemente entraron. Simplemente entraron, sin campos minados”, dice.
Me muestra un video de una transmisión con drones tomada hace unos días de pequeñas columnas de tropas rusas simplemente cruzando la frontera, sin oposición.
Dice que los funcionarios habían afirmado que se estaban construyendo defensas a un costo enorme, pero en su opinión, esas defensas simplemente no estaban ahí. “O fue un acto de negligencia o corrupción. No fue un fracaso. Fue una traición”.
Todos sabían que era probable que ocurriera esta incursión. Tanto la inteligencia ucraniana como la occidental sabían que Rusia había estado acumulando fuerzas al otro lado de la frontera, y se estimaba que concentraba hasta 30.000 soldados.
El presidente Vladimir pilinguin también había declarado públicamente su objetivo de crear una zona de amortiguamiento dentro de la región de Kharkiv para proteger el territorio ruso de los ataques de la artillería ucraniana.
Pero Ucrania parece haber estado mal preparada, a pesar de las negativas oficiales.
Denys, hablando desde un parque en Kharkiv, dice que dentro de una hora estará de regreso en la línea del frente con sus hombres cerca de la ciudad de Vovchansk, a sólo 5 kilómetros (3 millas) de la frontera rusa.
Según informes, las tropas rusas ya han entrado en las afueras de la ciudad. Denys me dice que teme que pronto vuelva a estar en manos rusas.
Habíamos visitado la ciudad antes y nos unimos a un policía local, Oleksii, que estaba recogiendo a los residentes que querían huir a un lugar seguro. Conducía rápido para evitar los drones rusos que sobrevolaban y el constante bombardeo de artillería.
La población de la ciudad antes de la guerra rondaba los 20.000 habitantes. La mayoría se había ido al comienzo de la guerra y se redujo a 3.000 residentes, pero cientos más se han ido en los últimos días. Oleksii dice que “es más fácil irse ahora, antes de que los maten o resulten heridos”.
En Járkov, Rusia está utilizando tácticas demasiado conocidas para avanzar: reducir a escombros las aldeas y ciudades ucranianas. Oleksii estima que Rusia ha estado disparando entre 50 y 60 proyectiles cada hora contra la ciudad. Y luego están las bombas planeadoras, disparadas desde aviones rusos a decenas de kilómetros de las líneas del frente, muy fuera del alcance de las limitadas defensas aéreas de Ucrania.
Rusia ha estado lanzando alrededor de 100 bombas planeadoras por día a lo largo de un frente de 1.000 kilómetros. Escuchamos media docena de sus chirridos parecidos a aviones en el transcurso de una hora, seguidos de explosiones devastadoras.
La casa de Serhii fue destruida por una de esas bombas planeadoras. De pie entre los escombros humeantes, me dijo que su esposa, Svetlana, había resultado gravemente herida. Estaba curándose las heridas en las manos, quemadas por la explosión.
Me dijo que le gustaría irse, “¿pero qué puedo hacer?”. Señaló a sus tres cabras que no quería dar de baja de la suscripción de la vida. De alguna manera, habían sobrevivido milagrosamente junto con su gato. Serhii todavía se aferraba a sus últimas posesiones.
La mayoría de los que se quedaron en Vovchansk son ancianos y pobres.
Pero Oleksandr, de 65 años, ya está harto. Lo vimos hacer la señal de la cruz, saliendo de la casa en la que había crecido. Tocó el suelo con ternura, recogió dos bolsas y se subió al coche de la policía.
Dijo que quería ir a Alemania pero que no tenía idea de cómo llegaría allí.
Abrir un nuevo frente aquí en el norte está ejerciendo presión sobre los limitados recursos de Ucrania. La demora de Estados Unidos en aprobar más apoyo militar ha dejado sin municiones a las tropas ucranianas.
En promedio, Ucrania sólo ha podido disparar una ronda de artillería frente a 10 de Rusia. Esto ahora se está abordando lentamente, con el apoyo de Estados Unidos.
Pero la ofensiva de Járkov también pone de relieve los problemas que la propia Ucrania ha tardado en abordar: movilizar suficientes tropas y construir líneas de defensa adecuadas. Los refuerzos enviados a Járkov tuvieron que ser retirados de otras partes del frente y de reservas limitadas.
Los funcionarios ucranianos todavía insisten en que la ciudad de Kharkiv no está bajo amenaza de una oleada turística terrestre. Pero cuanto más avance el ruso, más probable será que se encuentre dentro del alcance de la artillería rusa.
De vuelta en un parque en Kharkiv, Denys dice que cree que las fuerzas rusas intentarán concentrarse en el Este y capturar todo el Donbas. Pero dice que Rusia también está tratando de explotar las debilidades de Ucrania en todo el frente de 1.000 kilómetros. En Kharkiv han encontrado uno.
"Por supuesto que estoy enojado", dice Denys. “Cuando luchábamos por este territorio en 2022, perdimos miles de personas. Arriesgamos nuestras vidas.
"Y ahora, como alguien no construyó fortificaciones, volvemos a perder gente".
Russians simply walked in, Ukraine troops in Kharkiv tell BBC
The BBC's Jonathan Beale meets front-line soldiers battling Russia's new incursion in north-east Ukraine.
www.bbc.com
