Mi abuelo que en paz descanse fue y será allá donde esté guardia civil; y siempre, y digo siempre, llevaba la pistola encima, hasta dormía con ella debajo de la almohada. Me decía que cuando eres GC, nunca debes de bajar la guardia porque siempre hay alguien que quiere hacerte daño y antes de eso, lo haces tú!!!. Claro, al pobre hombre le tocó patrullar en la frontera con Portugal en plena guerra civil en lucha contra el contrabando, hoy en día están mu tranquilitos en sus despachos, ni limpiarán sus armas a diario como hacia mi abuelo, claro ahora son más modernas, no se encasquillan, salvo excepciones, la GC parece un funcionariado igual que el burocrático pero con pistola.