Visto así, habrá que considerar a Videla, Pinocho, Bánzer, Trujillo y demás, líderes de gobiernos rojazos.
Como han escrito más arriba ha habido más golpes de estado de izquierda, lo que pasa es que estos están camuflados bajo el término “revolución”. De hecho hay otro término llamado “pronunciamiento” que pone de relieve los continuos golpes de estado de los sectores más izquierdistas del liberalismo durante todo el siglo XIX en España e Iberoamérica. El pronunciamiento de Riego, el de los Sargentos de la Granja, la Vicalvarada, el de los sargentos de San Gil, la Revolución Gloriosa de 1868, son todo golpes de estado de sectores más a la izquierda. Y en Iberoamérica tenemos en este siglo a Daniel Ortega, Chávez y Maduro, los Castro… No ver cómo Evo jovenlandesales y su presidente títere arrestan al principal opositor por pensar diferente.
Dictadores que no se van, como sí hizo el tan denostado Pinochet cuando vio que no tenía apoyo popular.
Por mi parte, creo que la estrategia de los que han asaltado el congreso en Washington o Brasília es un error, porque hacen creer al borrego medio que ellos son los golpistas, cuando no es así.