Os equivocáis por completo, e intentáis argumentar (no sé si con malicia o con total ignorancia) a favor de la no inclusión de mujeres ni personas racializadas en el cine. Bueno, miento, no os importa que estas personas tengan papeles en las películas, pero siempre que sean secundarios y sumisos al héroe protagonista varón blanco machista.
En el momento en el que alguien que no cumple con los sacrosantos privilegios (varón, blanco, hetero, occidental) se cuela como protagonista en una obra enseguida protestáis, no vaya a ser que la gente piense con criterio propio y ponga en duda el sistema patriarcal sobre el que se sustenta el machismo. ¿Por qué protestáis tan airadamente cada vez que las mujeres, gracias a su lucha feminista, conquistan más ámbitos de poder? He ahí la prueba.
Much@s ya estamos cansados de ver en todas las películas como protagonista al típico héroe machuno que ensalza todos los valores de la masculinidad más tóxica y que arregla todo mediante la violencia, el machismo y el racismo. Además de que en esas películas las mujeres son vistas como objetos trofeo del protagonista, siempre sumisas a él.
Ante ese cine tan primario para mentes básicas, se abre un nuevo cine que tiene como protagonistas a personas racializadas y mujeres, y que no basan la película en resolver todo mediante golpes, violencia, relaciones machistas, considerar a las mujeres como objetos o ser el hombre más machuno y violento. Est@s nuev@s protagonistas recurren a otros mecanismos, a la inteligencia, el talento, la sororidad, el empoderamiento, por lo que el cine alcanza nuevas metas.
Precisamente, eso es lo que os da miedo, que este nuevo cine protagonizado por personas sin privilegios masculinos o raciales vaya a superar en calidad las típicas películas de protagonistas machistas (que por cierto, todas tienen el mismo argumento: hombre blanco machista actúa mediante la fuerza y la violencia para conseguir sus objetivos y se acuesta con la mujer sumisa. FIN)