El fin del pequeño comercio

Compro libros habitualmente. Voy a librerías físicas, porque me divierte ver los libros y llevarme algunos.

Ahora bien, he encontrado librerías de segunda mano en que te venden los libros MÁS caros que nuevos; no libros de ediciones antiguas, sino el mismo libro y de la misma editorial más caro que en la librería de al lado donde te lo venden nuevo.

Es bastante habitual también tener que llevar el libro del estante a un escáner para conocer el precio, lo que hace la experiencia tediosa e incómoda.

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Prefiero comprar casi todo tipo de artículo en tienda física, pero también es verdad que ir salir a comprar es un suplicio. gente por doquier, masificación, falta de variedad -todo son grandes cadenas-, concentración en zonas comerciales...

Codearte con jovenlandeses y latinoamericanos, sus churumbeles, su musiquita, su griterío, su aspecto vulgar e indecente, rellenitos, te quita las ganas.

Entrar en algunos comercios con la música a todo trapo tampoco gusta. Agota.
Marx, que no era sospechoso de ser un capitalista, ya denunciaba hace el fetichismo de la mercancía y la fantasmagoría. Vas a comprar a según qué sitios y parece que vayas a una discoteca de playa.

No es raro tampoco que la tienda te obligue a entrar a internet para ver las calidades o características del producto. Si entras a la web para ver el producto X, en nada te aparecerán ofertas mejores. No es raro tampoco que la tienda física no ofrezca lo que promete ofrecer en su web.
El trato del personal no suele ser muy amable. No me gusta que me atienda una persona mascando chicle o vestiza como una astuta sin modales.

La experiencia de ir a comprar ya no nos resulta placentera para muchos. La chusmificación del espacio público.
 
Compro libros habitualmente. Voy a librerías físicas, porque me divierte ver los libros y llevarme algunos.

Ahora bien, he encontrado librerías de segunda mano en que te venden los libros MÁS caros que nuevos; no libros de ediciones antiguas, sino el mismo libro y de la misma editorial más caro que en la librería de al lado donde te lo venden nuevo.

Es bastante habitual también tener que llevar el libro del estante a un escáner para conocer el precio, lo que hace la experiencia tediosa e incómoda.

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Prefiero comprar casi todo tipo de artículo en tienda física, pero también es verdad que ir salir a comprar es un suplicio. gente por doquier, masificación, falta de variedad -todo son grandes cadenas-, concentración en zonas comerciales...

Codearte con jovenlandeses y latinoamericanos, sus churumbeles, su musiquita, su griterío, su aspecto vulgar e indecente, rellenitos, te quita las ganas.

Entrar en algunos comercios con la música a todo trapo tampoco gusta. Agota.
Marx, que no era sospechoso de ser un capitalista, ya denunciaba hace el fetichismo de la mercancía y la fantasmagoría. Vas a comprar a según qué sitios y parece que vayas a una discoteca de playa.

No es raro tampoco que la tienda te obligue a entrar a internet para ver las calidades o características del producto. Si entras a la web para ver el producto X, en nada te aparecerán ofertas mejores. No es raro tampoco que la tienda física no ofrezca lo que promete ofrecer en su web.
El trato del personal no suele ser muy amable. No me gusta que me atienda una persona mascando chicle o vestiza como una astuta sin modales.

La experiencia de ir a comprar ya no nos resulta placentera para muchos. La chusmificación del espacio público.

 
Compro libros habitualmente. Voy a librerías físicas, porque me divierte ver los libros y llevarme algunos.

Ahora bien, he encontrado librerías de segunda mano en que te venden los libros MÁS caros que nuevos; no libros de ediciones antiguas, sino el mismo libro y de la misma editorial más caro que en la librería de al lado donde te lo venden nuevo.

Es bastante habitual también tener que llevar el libro del estante a un escáner para conocer el precio, lo que hace la experiencia tediosa e incómoda.

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Prefiero comprar casi todo tipo de artículo en tienda física, pero también es verdad que ir salir a comprar es un suplicio. gente por doquier, masificación, falta de variedad -todo son grandes cadenas-, concentración en zonas comerciales...

Codearte con jovenlandeses y latinoamericanos, sus churumbeles, su musiquita, su griterío, su aspecto vulgar e indecente, rellenitos, te quita las ganas.

Entrar en algunos comercios con la música a todo trapo tampoco gusta. Agota.
Marx, que no era sospechoso de ser un capitalista, ya denunciaba hace el fetichismo de la mercancía y la fantasmagoría. Vas a comprar a según qué sitios y parece que vayas a una discoteca de playa.

No es raro tampoco que la tienda te obligue a entrar a internet para ver las calidades o características del producto. Si entras a la web para ver el producto X, en nada te aparecerán ofertas mejores. No es raro tampoco que la tienda física no ofrezca lo que promete ofrecer en su web.
El trato del personal no suele ser muy amable. No me gusta que me atienda una persona mascando chicle o vestiza como una astuta sin modales.

La experiencia de ir a comprar ya no nos resulta placentera para muchos. La chusmificación del espacio público.
Quieres te atiendan licenciadas, sin tatuar, ya ni el Corte inglés, sinceramente pq no hay personas menores de 40 que cumplan eso y quieran atender al público.

En lo de la educación, antes en una tienda los guiris entraban sin decir ni hola y se iban igual. Ahora ya todos, menos las señoras de más de 70.
Yo lo achaco al internet , que entras en una web, miras y te vas con un click, pues en una tienda física igual.
 
Desde el viernes pasado parón brutal en comercio a pie de calle, en Salamanca.

Por otra parte, proveedores que tardaban 3 semanas en servir, sirven ahora en 5 días, ofertas de compre ahora y pague en otoño.

Algún proveedor grande, ya me veo va a caer (asesor, y sectores que solicitan informes).
 
Desde el viernes pasado parón brutal en comercio a pie de calle, en Salamanca.

Por otra parte, proveedores que tardaban 3 semanas en servir, sirven ahora en 5 días, ofertas de compre ahora y pague en otoño.

Algún proveedor grande, ya me veo va a caer (asesor, y sectores que solicitan informes).

Debe ser eso que llaman "el canario en la mina".
descarga.jpeg



Respecto a lo que estamos hablando, me parece que el canario hace tiempo que se murió. :rolleyes:
 
Debe ser eso que llaman "el canario en la mina".
Ver archivo adjunto 1902648



Respecto a lo que estamos hablando, me parece que el canario hace tiempo que se murió. :rolleyes:
Yo desde el lunes, otros 2 comercios en zona centro de liquidación por cierre. Una librería enfrente de 2 colegios.

Y va a ir a más con lo del TPV conectado a hacienda, ya no sólo por el control, sino pq el ordenador sino lleva el windows10/11 no vale, conexión a Internet, 800 pavos mínimo de actualizar el programa de gestión a lo nuevo.

Ya veo chinos con liquidación por cierre en el centro, y en poligonos por reformar ( como no reformen las estanterías, pq es una fruta nave pelada)
 
Yo creo que la gente cada vez más prefiere comprar por internet y que se lo traigan a casa. Otros siguen yendo a tiendas, pero solo para verlo en persona y luego acaban comprando el producto por internet si les convence. Y al final son la gente más mayor o la que no usa internet, la que acaba comprando en los pequeños comercios.

Por eso nosotros hemos optado por poner solo la venta online a través de nuestra web, ya que al menos también nos quitamos los gastos que supone un alquiler, impuestos, etc.

Saludos.
 
Yo desde el lunes, otros 2 comercios en zona centro de liquidación por cierre. Una librería enfrente de 2 colegios.

Y va a ir a más con lo del TPV conectado a hacienda, ya no sólo por el control, sino pq el ordenador sino lleva el windows10/11 no vale, conexión a Internet, 800 pavos mínimo de actualizar el programa de gestión a lo nuevo.

Ya veo chinos con liquidación por cierre en el centro, y en poligonos por reformar ( como no reformen las estanterías, pq es una fruta nave pelada)

A estas alturas, quien no lo quiera ver está completamente ciego, o es socialista.
 
Última edición:
A estas alturas, quien no lo quiera ver está completamente ciego, o es socialista.

Efectivamente y es un problema que irá a más. Yo solo tengo que ver mi pequeña ciudad natal y lo que en los años 80 era todo vida y bullicio, ahora son calles fantasmas con los comercios cerrados, salvo en el centro.
 
Ir a comprar se a convertido en un suplicio entre lumpen, chonis dependientas, desplazamiento, falta de stock y variedad.
 
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