MAESE PELMA
Hitler cambió mi vida.
- Desde
- 11 Jul 2021
- Mensajes
- 25.362
- Reputación
- 67.857
En un año, el 19 de diciembre de 2024, el actual director Adjunto Operativo (DAO), José Ángel González conocido como Jota, cumple 65 años y se jubila. Razón por la que sus compañeros comienzan ya a rivalizar para relevarle en el puesto. Uno de los aspirantes es el actual jefe superior de la Policía Nacional en Madrid, el comisario principal Manuel Soto Seoane. Fuentes policiales consultadas por OKDIARIO aseguran que «Manolo Soto» es un «socialista» que, en los últimos meses, se «está moviendo muy bien» para que el PSOE se fije en él como próximo DAO. Además, no ha sido baladí su última labor. Sus compañeros en la Policía le señalan como el responsable de las cargas desproporcionadas contra los manifestantes que llevan semanas de protestas en la madrileña calle de Ferraz.
«El socialista Soto Seoane, responsable del orden público en Madrid, es el máximo responsable de los agentes, desplegados por el Ministerio del Interior en la sede de los socialistas, que cargaron duramente contra los manifestantes que protestaban por el acuerdo entre el PSOE y Junts para la legislatura de Pedro Sánchez», señalan fuentes policiales a este periódico.
Cargas en Ferraz
Hay que recordar que estas cargas fueron criticadas por antiguos mandos de las Unidades de Intervención Policial, la UIP de la Policía Nacional, que estaban asombrados por el inusual comportamiento de los agentes. Estos altos mandos –la mayoría de ellos en activo, pero actualmente en otras unidades– diferenciaban dos escenarios: las concentraciones pacíficas y otras aisladas en las que grupos ultras se infiltraron en la manifestación para reventarla atacando a los policías. En el primer caso –que han sido la mayor parte de las concentraciones–, los ex altos mandos de la UIP no entendían por qué se utilizó la represión policial en Ferraz. Ocurrió, por ejemplo, el 6 de noviembre, cuando lanzaron gases fumígenos o lacrimógenos.
Estos mandos sentenciaron que los agentes al cargo de Soto llevaron a cabo cargas «desproporcionadas» en las que los policías «generaron más conflicto». Sin embargo, estas cargas injustificadas ahora le suman puntos al comisario Manolo Soto para que el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, le proponga como nuevo DAO. «Se ha colocado una medalla de cara al Partido Socialista, aunque la actuación policial haya sido nefasta», explican fuentes policiales.
También destaca la labor llevada a cabo por los Focus –como se conoce al Grupo Operativo de Respuesta de la comisaría de Centro– en las concentraciones del llamado Noviembre Nacional. Estos policías de paisanos estaban al mando del comisario y máximo responsable de Centro, Alberto Carba, muy amigo de Manuel Soto.
Carba, explican a OKDIARIO, que espera que «su íntimo amigo Soto le coloque en un puesto de relevancia, cuando ascienda a DAO», se vanaglorió por «el número de detenciones que sus agentes ejecutaron en Ferraz». Sin embargo, sus superiores no felicitaron estas intervenciones tras visualizar los vídeos que se difundieron en redes sociales.
El «favorito» de Mercedes González
Dentro del cuerpo también destacan su buena sintonía con la que fuera delegada del Gobierno en la Comunidad de Madrid y fugaz directora de la Guardia Civil, Mercedes González.
Durante la toma de posesión de Soto como jefe regional de Operaciones de la Policía Nacional en la Comunidad de Madrid, en septiembre de 2021, Mercedes González –que presidió el acto– elogió, con gran ímpetu para los asistentes, al comisario. «Si ella tiene capacidad de decisión, propondrá a Soto como DAO sin lugar a duda», señalan fuentes policiales.
Mercedes González y Manuel Soto.
Polémica con sus compañeros
Varios policías subordinados de Manuel Soto explican que «le pierden las formas». «No sabe mandar», aseguran. Además, recuerdan el caso de la jefa de Seguridad Ciudadana de la comisaría del distrito de Centro, a quien cesó por llevarle la contraria. Se da la circunstancia de que el máximo responsable de esa comisaría es el policía Alberto Carba, amigo íntimo de Manuel Soto.
Habitualmente, los agentes recién llegados suelen realizar labores de gestión de calabozos o los trabajos de secretaría, que son los menos demandados. Y a medida que cumplen años en ese destino, todos van saliendo a patrullar como recompensa por su antigüedad. Pero, la inspectora jefa encargada de establecer los puestos recibió desde la Jefatura de la Policía de Manuel Soto la orden de que un nuevo agente debía recibir un trato de favor: pasaría directamente a trabajar en la calle. Ella se negó y Manuel Soto la cambio a la comisaría de Villa de Vallecas, considerada en el cuerpo como un destino de castigo.
Fuentes policiales aseguran que el objetivo del comisario principal Manuel Soto es conseguir la vacante que dejará en un año José Ángel González al frente del DAO. Pero si esto no fuera posible, sopesan que obtendrá alguna de las cinco comisarías generales de la Policía como premio por su labor al frente de los disturbios durante las protestas en Ferraz.
«El socialista Soto Seoane, responsable del orden público en Madrid, es el máximo responsable de los agentes, desplegados por el Ministerio del Interior en la sede de los socialistas, que cargaron duramente contra los manifestantes que protestaban por el acuerdo entre el PSOE y Junts para la legislatura de Pedro Sánchez», señalan fuentes policiales a este periódico.
Cargas en Ferraz
Hay que recordar que estas cargas fueron criticadas por antiguos mandos de las Unidades de Intervención Policial, la UIP de la Policía Nacional, que estaban asombrados por el inusual comportamiento de los agentes. Estos altos mandos –la mayoría de ellos en activo, pero actualmente en otras unidades– diferenciaban dos escenarios: las concentraciones pacíficas y otras aisladas en las que grupos ultras se infiltraron en la manifestación para reventarla atacando a los policías. En el primer caso –que han sido la mayor parte de las concentraciones–, los ex altos mandos de la UIP no entendían por qué se utilizó la represión policial en Ferraz. Ocurrió, por ejemplo, el 6 de noviembre, cuando lanzaron gases fumígenos o lacrimógenos.
Estos mandos sentenciaron que los agentes al cargo de Soto llevaron a cabo cargas «desproporcionadas» en las que los policías «generaron más conflicto». Sin embargo, estas cargas injustificadas ahora le suman puntos al comisario Manolo Soto para que el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, le proponga como nuevo DAO. «Se ha colocado una medalla de cara al Partido Socialista, aunque la actuación policial haya sido nefasta», explican fuentes policiales.
También destaca la labor llevada a cabo por los Focus –como se conoce al Grupo Operativo de Respuesta de la comisaría de Centro– en las concentraciones del llamado Noviembre Nacional. Estos policías de paisanos estaban al mando del comisario y máximo responsable de Centro, Alberto Carba, muy amigo de Manuel Soto.
Carba, explican a OKDIARIO, que espera que «su íntimo amigo Soto le coloque en un puesto de relevancia, cuando ascienda a DAO», se vanaglorió por «el número de detenciones que sus agentes ejecutaron en Ferraz». Sin embargo, sus superiores no felicitaron estas intervenciones tras visualizar los vídeos que se difundieron en redes sociales.
El «favorito» de Mercedes González
Dentro del cuerpo también destacan su buena sintonía con la que fuera delegada del Gobierno en la Comunidad de Madrid y fugaz directora de la Guardia Civil, Mercedes González.
Durante la toma de posesión de Soto como jefe regional de Operaciones de la Policía Nacional en la Comunidad de Madrid, en septiembre de 2021, Mercedes González –que presidió el acto– elogió, con gran ímpetu para los asistentes, al comisario. «Si ella tiene capacidad de decisión, propondrá a Soto como DAO sin lugar a duda», señalan fuentes policiales.
Mercedes González y Manuel Soto.Polémica con sus compañeros
Varios policías subordinados de Manuel Soto explican que «le pierden las formas». «No sabe mandar», aseguran. Además, recuerdan el caso de la jefa de Seguridad Ciudadana de la comisaría del distrito de Centro, a quien cesó por llevarle la contraria. Se da la circunstancia de que el máximo responsable de esa comisaría es el policía Alberto Carba, amigo íntimo de Manuel Soto.
Habitualmente, los agentes recién llegados suelen realizar labores de gestión de calabozos o los trabajos de secretaría, que son los menos demandados. Y a medida que cumplen años en ese destino, todos van saliendo a patrullar como recompensa por su antigüedad. Pero, la inspectora jefa encargada de establecer los puestos recibió desde la Jefatura de la Policía de Manuel Soto la orden de que un nuevo agente debía recibir un trato de favor: pasaría directamente a trabajar en la calle. Ella se negó y Manuel Soto la cambio a la comisaría de Villa de Vallecas, considerada en el cuerpo como un destino de castigo.
Fuentes policiales aseguran que el objetivo del comisario principal Manuel Soto es conseguir la vacante que dejará en un año José Ángel González al frente del DAO. Pero si esto no fuera posible, sopesan que obtendrá alguna de las cinco comisarías generales de la Policía como premio por su labor al frente de los disturbios durante las protestas en Ferraz.
