Cuando viajaba a Alemania hace ya una década, para participar de algún montaje o formación de maquinaria, observaba que allí, todo, era made in germany, osciloscopios, herramientas eléctricas, llaves fijas, destornilladores, vehículos de empresa, lápices… un día me dijeron que no llevara herramientas, que me las daban ellos allí.
Cuando venían aquí los alemanes a participar de un montaje, el cliente español pagaba la factura de un contenedor lleno de material alemán, carritos, alargadores, herramientas de mano, eléctricas, herrajes, todo, lo traían ellos, made in germany. Recuerdo incluso que para certificar las tierras de dos montajes, trajeron a un electricista alemán.
Efectivamente, somos iluso e incapaces de defender lo nuestro, y esa es la diferencia, no es una cuestión de capacidad, sino de confianza.