Lo que a las mujeres nos gustaría es poder viajar solas, salir a la calle a las tantas, aparcar el coche en la madrugada lejos de tu casa y volver andando, ir a la playa sin que te salgan pajilleros... en fin, poder hacer lo que quieran sin sentir que algún macho cabrio puede salirle de la nada y darle un susto.
Supongo que vosotros tan machotes que sois, no os habéis preocupado jamás de que os pase algo si viajáis solos o si estáis en el garaje de vuestra casa aparcando el coche y alguien os da un susto. Y si os pasara esto seguramente sabéis técnicas de karate para defenderos.
Lo que estaría bien es poder caminar por tu vida sin tener miedo o temor a que alguien te haga algo (seas hombre o mujer).
Tu discurso está lleno de lagunas y charcos. La inseguridad ciudadana es un problema generalizado. Existen hombres con miedo. Muchos. Ante los mismos colectivos que tú. A menos que lo que nos estés intentando decir es que tienes miedo de los españoles, de que te violen españoles. Pero no te creerá nadie. Porque son esos mismos a los que quieres tentar con tus taconazos y minifaldas en fiestas y discotecas. No, a esos no les tienes miedo. Al contrario. Tienes que darles confianza y promesa de premio rellenito para que te entren. Porque son unos cagones.
Tú tienes miedo de las bandas de malhechores que, en tu caso, pueden pasar de robarte a amarte en grupo.
Pero ese problema no es con los hombres, sino con hombres que no pertenecen a tu cultura. Prueba a pasar entre ellos con chilaba y hijab y verás cómo no te dicen más que buenas noches. Esos colectivos que consideran que si vistes provocativa es que eres una fruta que busca guerra. O sea, no son españoles a los que les cuesta fijarse en tí incluso aunque casi enseñes las ropa interior.
Tu discurso maniqueo forma parte de la estrategia estatal de la destrucción del hombre.
Luego vendrás tú y te van a jorobar. pero no los jovenlandeses, sino los funcionarios, los políticos y sus nuevas leyes.
Por ejemplo: Idearán un impuesto por no haber tenido hijos. ¿Qué te parece?