El Pionero
Alcalde y presidente de Fútbol Paco premium
Eran las nueve de la noche cuando el tren reducía velocidad para su tradicional parada en Sahagún antes de llegar a la capital leonesa. Sin embargo, lo que parecía ser una cuestión de minutos en lo que unos bajan y otros suben se convirtió en fin del viaje, al menos sobre raíles. Y es que llegado a ese punto el maquinista se apeó tras haber "terminado su jornada laboral", tal y como leyeron las decenas de viajeros que iban a bordo en las pantallas de la estación desde la que continuaron rumbo en autobús.
Así lo ha narrado a través de redes sociales uno de esos usuarios, quien explica en X como el pasado 27 de marzo «tras 20 minutos detenidos» en el municipio leonés, «el revisor comunica que no va a arrancar» el convoy apuntando la «excusa» de que «León no admite trenes».
«Tras cerca de 1 hora parados sin saber el motivo descubrimos que la incidencia» es que «el maquinista ha terminado su jornada laboral», tal y como apunta este viajero que se podía leer en el panel de salidas y llegadas de la estación, un mensaje que, añade, «se esfuma en minutos». «La situación es hasta cómica», apostilla. Y es que «entre los implicados de esta estampida» en autobús «parece que figura el propio maquinista». Finalmente, llegaron a destino, pero «dos horas y media después de la hora prevista», concluye Javier García en su hilo publicado en X.
Desde Renfe explican que el maquinista había tenido que cubrir otro trayecto anteriormente a esa conexión Madrid-León y que en ese trabajo previo una incidencia en la infraestructura provocó un retraso de 88 minutos, lo cual extendió el tiempo de conducción que tenía previsto ese día. Llegado a Sahagún alcanzó el máximo legal previsto a los mandos de un convoy, de manera que echó el freno.
www.abc.es
Así lo ha narrado a través de redes sociales uno de esos usuarios, quien explica en X como el pasado 27 de marzo «tras 20 minutos detenidos» en el municipio leonés, «el revisor comunica que no va a arrancar» el convoy apuntando la «excusa» de que «León no admite trenes».
«Tras cerca de 1 hora parados sin saber el motivo descubrimos que la incidencia» es que «el maquinista ha terminado su jornada laboral», tal y como apunta este viajero que se podía leer en el panel de salidas y llegadas de la estación, un mensaje que, añade, «se esfuma en minutos». «La situación es hasta cómica», apostilla. Y es que «entre los implicados de esta estampida» en autobús «parece que figura el propio maquinista». Finalmente, llegaron a destino, pero «dos horas y media después de la hora prevista», concluye Javier García en su hilo publicado en X.
Desde Renfe explican que el maquinista había tenido que cubrir otro trayecto anteriormente a esa conexión Madrid-León y que en ese trabajo previo una incidencia en la infraestructura provocó un retraso de 88 minutos, lo cual extendió el tiempo de conducción que tenía previsto ese día. Llegado a Sahagún alcanzó el máximo legal previsto a los mandos de un convoy, de manera que echó el freno.
Decenas de viajeros obligados a dejar el tren a 60 kilómetros de su destino tras acabar su jornada el maquinista
Fueron trasladados desde Sahagún a León en autobuses fletados por Renfe, que apunta a que el trabajador iba a superar el tiempo máximo de conducción tras una incidencia que había extendido un anterior viaje
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