Aurelia Vera
No adoctrinar... ¿Es también adoctrinar?
Con el sustillo en el cuerpo por el olor de las fogaleras de San Juan, humeantes algunas todavía, a las feministas el fuego nos pone en tensión, recibo de los medios de comunicación la convocatoria de una manifestación ante un Centro Educativo, que curiosamente fue el mío hasta hace poco y después de asegurarme que no era para celebrar la sentencia del Tribunal Supremo sobre la Manada, me pongo a reflexionar.
Vayamos por partes, como decía Jack el destripador:
1º. Que me da mucha pena no haber podido asistir, ya que yo también soy partidaria de que en las escuelas no se debe adoctrinar y deberíamos pensar a quién se le paga con dinero de todos para esta función, creo que a día de hoy al profesorado de religión. Pero como esto está dentro de la Constitución, ahí se queda. Quizá esta gente está desviando el foco de atención. Creo que hay una organización que se llama
presuntamente por la defensa de mis hijos, o algo parecido, al que me gustaría, si me admitieran, formar parte de él, pues creo que a nuestros hijos hay que defenderlos e intentar que no cometan delitos ni fuera ni dentro de las aulas, para nuestros propios intereses, será esto violencia intrafamiliar…
2º. Que si adoctrinar en clase es admitir como argumentos racionales que la tierra es redonda y que científicamente se acepta la teoría de la evolución de las especies, la teoría del Big Bang, y que en Venezuela el problema es más profundo que quitar a uno para poner a otro, pues sí quizá sea adoctrinadora.
3º. Que no admitir en mis clases ningún comentario denigrante sobre alumnado gays, transexual, lesbianas o perteneciente a cualquier otra diversidad sensual es adoctrinar, pues sí lo admito.
4º. Que si adoctrinar es intentar explicar y sin justificar nunca la violencia ni al que comete el atentado, que detrás de todo hay unas causas que no se agotan solo en el atentado y que no hay una sola parte culpable ni víctima totalmente, sí quizá sea adoctrinadora.
4º. Que si llevo un texto a clase donde se trata lo que queda por conseguir en Occidente para conseguir la igualdad efectiva entre hombres y mujeres, que es mucho, sí puede que tenga una visión de género.
5. Que si después que el alumnado, femenino es verdad, llevara a clase una noticia que les ha llamado la atención sobre un juez que no considera insulto llamar
astuta a una mujer ,reflexionamos cómo deberían ser llamados a los hombres que matan, más de mil ya, que violan, abusan y someten a las mujeres y después de analizar la lexicalización de los tacos y adornarlo con una poesía de nuestro ilustre Camilo José Cela, donde decía que por el pompis ni la barba de un langostino (¡Qué les gustó a cierto sector del alumnado esta poesía!, aconsejo su lectura, para que se vea lo que es dogmatizar a través de los textos y tener encima que decir que esto es una genialidad) concluir que son, ni más ni menos que hijos de... Y no locos. Pues vale, también.
6. Que si adoctrinar es coger a un alumnado en tercero donde la mayoría no se sabía ni su DNI y las consecuencias de no llevarlo encima y al salir en cuarto de la ESO,(etapa que se considera final de la transición a la vida adulta por nuestra Ley Educativa, personas ya con responsabilidad penal con restricciones y sin ella dentro de algunos meses), entienden un debate electoral y es capaz de hacer un comentario muy parecido al de los críticos y por lo que es felicitado incluso por el resto del profesorado, que si eso es adoctrinar, sí soy responsable.
7. Que la metodología empleada para conseguir esto es variada, a veces insolente, a veces con un vocabulario informal y vulgar, pero jamás cuestionada a los largos de los años y se justifica ante la apatía en el aprendizaje que no se vence con contenidos gramaticales, que en poco o en nada les van a formar en valores, (hagan ustedes el análisis sintáctico de cualquier parte de este texto y saquen conclusiones. ¿Se acuerdan de lo que es el complemento régimen, el atributo, el suplemento o el sintagma nominal ?) cosa que también nos permite nuestra Ley.
8. Que me gustaría, si tuvieran tiempo, todos los padres y madres, los que se manifiestan y los que no, que se lean completa le Ley Educativa Canaria y que pienso que están en todo su derecho de que a sus hijos se les eduque de la forma que se quiera, al respecto hay que recomendarle unos colegios privados que seguro cumplirán sus expectativas. Que la educación pública tiene otros objetivos y que no es la única forma de educar.
10 y último, para no cansar. Que a veces no hay mal que no convenga...y conviene ahora hacer una reflexión sobre el adoctrinamiento en las escuelas, quién lo hace, quién cobra por ello y sobre todo quién tiene intereses para que el pensamiento crítico, divergente, el de la libertad de expresión, pensamiento y conciencia no se dé en ella. ¿Acaso no dar una visión diferente y dar por bueno lo establecido no es adoctrinar también…? Reflexionemos.
PD: Y viva nuestra Democracia que permite en total libertad ocupar una vía pública para pedir que en otro espacio público esa libertad no se ejerza. Así es nuestra Democracia y así debe ser… Defendámosla y creamos en ella.
Y, ojo científicos, quizá el eslabón perdido no esté tan atrás en nuestra evolución.
