Eso daría para un debate. ¿ Por qué a las mujeres en general, y a las charos (incluyo a mujeres y gaies funcivagos y/o administrativos),les "encanta" el Realismo mágico?
Lo mencionado por
@cebollo es un muy buen apunte sociológico.
A mi modo de ver, creo que a las charos les mola, porque, a grandes rasgos, todos los argumentos de esas novelas son muy parecidos.
Y ojo, no es realismo mágico del heavy del metal. No te van a leer "Lituma en los Andes" o "Señor Presidente".
Todas las novelas son de una pedorra que tiene un trauma TRMENDOO (por un marido iluso, porque se ha arruinado, porque está escapando de una guerra, o es la heredera de una familia jodida, o va a palmar de algo chungo sin cura posible y le quedan 3 años de vida, o porque el novio la abandona, etc, etc), y la protagonista acostumbra a "necesitar un cambio", y para eso viaja a un sitio molón: para "evadirse", o porque está huyendo.
Algunas que "arriesgan" plantean personajes que hacen algo más tipo descubrir algo acojonante pero tener el dilema de que nadie la cree porque tiene chumino, hablar de que la protagonista conoce el lenguaje de los delfines pero el gobierno la persigue para que no revele su secreto, o alguna fantasmada similar.
Pero ya digo, la mayoría son protagonistas sosas que van del punto A al punto Z porque tienen un problema que "resolver".
Allí la protagonista descubre recuerdos de su pasado, a una anciana sabia, a la niña que nunca fue, los recuerdos de su abuela, las cartas perdidas de nosequíen, y ya que está, como sin querer, se ama a un estupendo maromo que cae rendido a sus pies.
Y en su vertiente histórica, lo mismo, pero con algo más de inquina, y "desarrollo".
- Menganita de Círene es una filósofa pre-socrática, pero nadie le hace ni puñetero caso porque los hombres son muy malos. Monta una revuelte en plan Lísitrata, la condenan a muerte, y al final nos enteramos de que era la abuela de Sócrates.
- Zutanita del Nilo es constructora de templos y pirámides, y tiene que luchar contra el malvado faraón, que es su padre. Al final se alía con Jerjes y se ama a su hijo, y es declarada reina de Persia mientras se venga de su malvado pueblo.
- Perenganita de Parma es una mujer del renacimiento pero vive enclaustrada como una monja por culpa del duque de Venecia. Se escapa del convento, se ama a Caravaggio, y monta una revuelta disfrazándose de hombre y declarándole la guerra al Papa y al duque de Venecia.
Etc, etc, etc...
Siempre es un personaje femenino fuerte, pero que se comporta como una auténtica pánfila. Una especie de mezcla entre la de Tomb Raider, una Monja Alferez, y Gracita Morales. ama mucho, aprende mucho, y es una victima que empieza siendo una pringada para convertirse en una especie de Diosa Destructora que ama aun más, y busca "justisia" por desagravios a cada cual más absurdo.
(Básicamente es pronografia psicológica)
Evidentemente las lectoras no ven contradicciones en la narrativa, ni en la estructura, ni en nada de nada.
Cualquier novelucha de vaqueros de Marcial Lafuente Estefanía está mejor escrita que el 80% de esos libros.
Son un absoluto aburrimiento de novelas, pero una cosa si que es cierta, y hay que mencionar: Si las marujas no leyesen, la industria editorial Española se iría a la quiebra mañana mismo en su totalidad.
Por cierto, conviene recordar que el 80% de editoriales de España están ubicadas en Barcelona.
Como buenos vendedores de humo, supieron muy bien dónde estaba el mercado de la "literatura".
(Bueno, y hubo cosas decentes como Seix Barral, pero eso es otro tema)
Antes las novelas las escribían franceses con bigote (Balzac), o tíos que eran aviadores, que habían estado en una guerra como periodistas (Hemingway), locas de entre-guerras cojonudas (Duràs), o tipas con cierta cabeza (Pardo Bazán, K.Mansfield).
Ahora las proto-charos no leen, o si leen algo es un tostón predecible e "intimista" escrito por una presentadora de la tele (por su oscuro, más bien) a la que todo el mundo le aplaude las gracias en Twitter.
Y las pocas proto-charos que leen esas "novelas" las compran en Amazon y el Corte Inglés.
Es rarísimo ver a una mujer joven en éste país leerse "El Árbol de la Ciencia" por motu propio, y sin que se lo hayan mandado en el instituto o en la facultad donde estudia filología. Y no digamos un ensayo de Gombrich o algo de Hume o de Voltaire...
A lo sumo novela negra si tienen aficion, Murakami o alguna japonesada por algún noviete gafapasta que tuvieron, y si me apuras mucho Camus porque se le recomendó una tía-abuela suya que estuvo exiliada en París hace 60 años.
Poco más. Sé de lo que hablo que conozco muy bien el gremio.
Eso si, Megan Maxwell y hezs por el estilo... los devoran, porque, al fin y al cabo es lo de siempre.
pronografía psicológica.
O mejor dicho, sentimental.
Y mal, muy mal escrita.