Ahora está explicando en la Cuatro, la poseída por el malo. Reconoce que tiene un problema psiquiátrico y que fue la médico que la atendió, la que intentó agredirla, que luego fue el segurata de la puerta y, finalmente los mozos de cuadra. Ahora va a denunciar a todos, a todos. La tía, eso sí, acompañada por su madre, muy cuerda cuando tiene que hablar de denunciar pero tan loca que admite que, cuando un mozo de cuadra le enseñó la taser, diciendo que si sabía lo que era eso, porque se vería obligado a usarla, la muy chulita le soltó: "Si tienes cojoneh la usarás". Obviamente, el tío, que no tía, pues la usó.