Los de RRHH van avisando: "Los jóvenes ya no aguantan el 'haces lo que yo te diga' del jefe"

"Actualmente, muchos jóvenes que entran en el mercado laboral forman parte de una generación sobrecualificada que, sin embargo, cada vez es más consciente de que eso de la meritocracia de la que tanto les hablaron, no existe".

Menudo descubrimiento.nosomosdignos:=D>roto2
Sobrecualificados en papeles.
 
hoy en día hay niños de 20-30 años, niños de 40 años incluso de 50.

para mí un tipo con 45 años que vive con papá y mamá, y que no sabe lo que es la vida adulta, es eso, un niño grande...

Cincuentones con chupete. Se les ve venir desde muy lejos. Los mantenidos se van solos cuando les señalas con la barbilla los perfiles metálicos y les dices donde los quieres.
 
A lo mejor influye que antes entrabas de joven barriendo la nave, cobrando una cosa si, pero con el paso de los años ibas subiendo de responsabilidad y trabajo, pero también en la nomina se notaba el cambio.

Pero ahora resulta que entras barriendo la nave, cobrando una cosa, te van metiendo mas responsabilidades y trabajo, pero amigo, el sueldo resulta que no sube.

Claro, eso a lo mejor a los primeros pues si, los engañaban, porque claro, entraban con 20-24 años y veían que los de 40 años cobraban un buen sueldo, pues pensaban, bueno, se aguanta unos años y luego se cobrará algo decente. Pero han ido pasando los años, a esos de 20-24 años los has tenido puteados, y ahora cobran poco mas teniendo 40 y pico años. ¿Que esperan que hagan los nuevos que entren? ¿Dejarse la vida viendo que dentro de 20 años van a acabar cobrando prácticamente lo mismo?

Y ya no entremos en lo que la gente ve con ciertos departamentos como los RRHH que no sabes muy bien a que se dedican, pero los ves de charleta cada vez que pasas por delante de su despacho, o como se pegan viajes a medio mundo gracias a que cobran el doble o triple que el resto porque resulta que se filtraron los sueldos por error en algun correo.
 
Yo he ido a entrevistas de trabajo (todos los años lo hago, me vaya bien o mal en mi empresa) y últimamente ven raro que vaya vestido de traje.

Mi respuesta es siempre la misma: "Nunca se puede ir vestido demasiado serio, pero siempre cabe la posibilidad de ir demasiado informal".
 
Normal, ¿quién en su sano juicio se somete a la esclavitud sin necesidad?
Porque no tengo quien me mantenga, ni donde caerme muerto, si lo tuviese, iba a trabajar su querida progenitora. Aún así me planteo mandarlo todo a tomar por ojo ciego y vivir en plan etniano, la auténtica salud.
 
"Actualmente, muchos jóvenes que entran en el mercado laboral forman parte de una generación sobrecualificada que, sin embargo, cada vez es más consciente de que eso de la meritocracia de la que tanto les hablaron, no existe".

Menudo descubrimiento.nosomosdignos:=D>roto2
"Sobrecualificada". meparto:

He visto con estos ojos a "ingenieros" de esa generación "sobrecualificada" con su diplomita de la Universidad Paco García de Villaabajo del Río que no saben ni lo que es una regresión lineal. Los títulos universitarios con los nuevos planes de estudios no valen para nada.

Lo que sí debo reconocer a la generación de chavales que se están incorporando al mercado laboral es que le han perdido el miedo y el respeto a las charos de residuos humanos y, en general, a esa veneración al trabajo por encima de cualquier valor. Es también sorprendente la cantidad de ellos que es resistente a la agenda pogre y a toda la morralla que tratan de meterles a macha-martillo en la cabeza. Nada que ver con los atolondrados de entre 30 y 45 años que parecen zombies.
 
Me alegra que no hayas escuchado nunca de tus monitos: hamí no me pajan pa heso.

Cuando lo escuché varias veces, descubrí que a mí no me pagan para ser psicólogo, me pagan para dar latigazos. Y al que no le guste mi sistema, puerta.

En tu caso hay dos opciones..

1- que tenga razón y el problema no es el trabajador
2- como si que he vivido una única vez no haciendo lo que tenía que hacer y le solicite explicándole el motivo la urgencia y la prioridad claramente , continuando con su actitud, fue despedido y el resto me dio la razón.


no tengo porque dar latigazos a diestro y siniestro a quien no se lo merece.
 
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