El problema de vivir a base de deuda es que dura lo que dura la seguridad de devolución.....y esta ya no está, no hay seguridad alguna de devolución porque este tipo de políticas financieras se basan en el crecimiento económico....y ¡sorpresa! en la inflación.
En un escenario económico de retroceso económico, con los bancos sin necesidades de liquidez (porque tampoco hay consumo o falta de incertidumbre que aliente la inversión) la inflación ni está ni se la espera. Así que tenemos una deuda que crece como la mala hierba y que los cálculos de cuento de la lechera que se habían hecho para pagarla no salen ni de coña.
Con esas mimbres, los que prestan (los que compran deuda) dejarán de comprar, con lo cual el chiringuito se cierra....o bien se hacen acuerdos de patada hacia delante como por ejemplo lo que se ha venido haciendo de: "te compro deuda pero a cambio me cambias esta legislación, me quitas aranceles, me compras X millones en lo que yo te diga en Y años...". Y con esa patada hacia delante salvan este match point pero el futuro lo complican aún más porque las posibilidades de crecimiento en ese nuevo entorno con un enemigo comercial más fuerte son cada vez más complicadas y vuelvo a decir, si no hay crecimiento no hay nada, se estanca el mercado laboral, con él el consumo, con éste la inversión y con ésta el sistema bancario.