Cocina más grande que mi salón... Pared forrada de madera con estanterías a medida....
Esa gente tiene pasta, y la única vez que han visto a un viajero es cuando le va la rumana a limpiar la casa. Acoger al jovenlandés es simplemente una experiencia más para dar tonalidad a sus aburridas vidas y poder decirle a todos sus conocidos lo solidarios que son. Si viviesen en un barrio pobre lleno de jovenlandeses trapicheando o latinoamericanos con el reggeton ya te digo yo a dónde iban a mandar al mena.