Scire
Madmaxista
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Se ha analizado muy en profundidad la cultura Paco en este foro, pero no me ha parecido haber visto aún un hilo dedicado al mejor amigo de Paco: el perro Paco.
Por lo general, suele ser un feo perro chucho; pero el perro Paco reúne además unas características muy particulares que lo distinguen de otra clase de chuchos: es pequeño y rellenito, contrahecho, sinónimo de mala mezcla y de una alimentación deficiente; suele ser paticorto, tener ojos saltones, orejas cortas y puntiagudas (o ligeramente caídas) y, si es hembra, arrastra sus ubres por las sucias aceras del barrio dormitorio Paco: seguramente ha nacido siete camadas.
El perro Paco suele caminar al ritmo de su dueño Paco, típico señor de mayor de extrarradio despechugado que huele a fritanga y Cruzcampo de bar Paco, y además parece arrastrar en sus cuatro patas todas las enfermedades del señor Paco.
Es un perro leal, inseparable de Paco, y de común poco agresivo, más bien indolente, como si careciera de perruna personalidad.
El perro Paco es crisol de perros de moda: carlinos, yorkshire, dachshund, terrier, chihuahua... Es la estirpe-vertedero de crías defectuosas que por pena no han sido sacrificadas, y que Paco ha rescatado de las ambiciosas manos de un vecino criador y ha acogido en su cálido hogar Paco para que le haga tierna compañía.
El perro Paco, sin embargo, como todo lo perteneciente a esta cultura, parece pleno y feliz. Es en sí todo un universo que se repliega sobre sí, que se nutre de sí mismo. El perro Paco camina alegre y con la cabeza bien alta a los pies de su dueño Paco, absolutamente dueño de sí, ajeno al resto del mundo, cósmico e imperecedero, como consciente de que, mientras exista un perro, siempre existirá él, venero y estero de todas las razas del mundo.
Típico perro Paco.
Perro Paco de mala uva. Ladra pero no muerde.
Por lo general, suele ser un feo perro chucho; pero el perro Paco reúne además unas características muy particulares que lo distinguen de otra clase de chuchos: es pequeño y rellenito, contrahecho, sinónimo de mala mezcla y de una alimentación deficiente; suele ser paticorto, tener ojos saltones, orejas cortas y puntiagudas (o ligeramente caídas) y, si es hembra, arrastra sus ubres por las sucias aceras del barrio dormitorio Paco: seguramente ha nacido siete camadas.
El perro Paco suele caminar al ritmo de su dueño Paco, típico señor de mayor de extrarradio despechugado que huele a fritanga y Cruzcampo de bar Paco, y además parece arrastrar en sus cuatro patas todas las enfermedades del señor Paco.
Es un perro leal, inseparable de Paco, y de común poco agresivo, más bien indolente, como si careciera de perruna personalidad.
El perro Paco es crisol de perros de moda: carlinos, yorkshire, dachshund, terrier, chihuahua... Es la estirpe-vertedero de crías defectuosas que por pena no han sido sacrificadas, y que Paco ha rescatado de las ambiciosas manos de un vecino criador y ha acogido en su cálido hogar Paco para que le haga tierna compañía.
El perro Paco, sin embargo, como todo lo perteneciente a esta cultura, parece pleno y feliz. Es en sí todo un universo que se repliega sobre sí, que se nutre de sí mismo. El perro Paco camina alegre y con la cabeza bien alta a los pies de su dueño Paco, absolutamente dueño de sí, ajeno al resto del mundo, cósmico e imperecedero, como consciente de que, mientras exista un perro, siempre existirá él, venero y estero de todas las razas del mundo.
Típico perro Paco.
Perro Paco de mala uva. Ladra pero no muerde.